Donald Trump anunció aranceles para el acero y aluminio. (Foto: AP)
Donald Trump anunció aranceles para el acero y aluminio. (Foto: AP)

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, aumentó la presión sobre México y Canadá al sugerir que podría excluir a esos dos países de las tarifas al acero y el aluminio en el caso de que las partes alcancen un nuevo Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) que sea "justo".

"Tenemos grandes déficits con México y Canadá. El TLCAN, que actualmente está en renegociación, ha sido un mal acuerdo para Estados Unidos, gran reubicación de empresas y empleos. Los impuestos en el acero y el aluminio serán retirados únicamente si un nuevo acuerdo es firmado", apuntó Trump en Twitter.

Esta nueva estocada del presidente estadounidense coincide con la sétima ronda en la renegociación del TLCAN, que se desarrolla en México, para tratar de pavimentar un camino a una actualización del acuerdo.

Trump había generado la semana pasada una interminable controversia global al anunciar la adopción de pesadas tarifas a las importaciones al acero (25%) y el aluminio (10%), medidas que impactarían especialmente a Canadá, el mayor proveedor de acero en el mercado estadounidense.

Este lunes, sin embargo, el mandatario claramente sugirió que México y Canadá solamente se verán a salvo de las pesadas tarifas si aceptan hacer concesiones en la mesa de negociaciones por el TLCAN.

En su mensaje de este lunes, Trump descargó su batería oratoria contra canadienses y mexicanos: a los vecinos del norte por su política comercial y a los del sur por considerar que no hacen lo suficiente en el combate a las drogas.

Críticas a asociados fundamentales
"También, Canadá debería tratar mejor a nuestros agricultores. Muy restrictivo", añadió el presidente, después de haber criticado varias veces a su vecino del norte, especialmente sobre su producción de leche.

"México debe hacer mucho más para impedir que las drogas inunden Estados Unidos. No han hecho lo que se debe hacer. Millones de personas son adictas y están muriendo", añadió.

Más tarde, al recibir en el Salón Oval al primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, Trump reiteró que Estados Unidos "hizo un mal negocio" con el TLCAN.

Estados Unidos tiene un déficit comercial "de US$ 800,000 millones. Hemos sido estafados por todo el mundo, por amigos y enemigos", comentó, para apuntar un déficit de "500,000 millones" con China.

Estas declaraciones, no obstante, no se destacan por la precisión: en el 2017 el déficit comercial estadounidense fue de US$ 566,000 millones (US$ 375,000 con China), siendo que el récord fue un déficit de US$ 708,000 millones en el 2008, de acuerdo con datos oficiales.

El secretario de Economía de México, Ildefonso Guajardo, también recurrió a Twitter para responder a Trump: "México no debe ser incluido en los aranceles de acero y aluminio. Es la manera equivocada de incentivar la creación de un TLCAN moderno", escribió.

A su vez, el secretario mexicano de Relaciones Exteriores, Luis Videgaray apuntó que el enfrentamiento al tráfico de drogas es una "responsabilidad compartida".

"Solo trabajando juntos sobre la oferta y la demanda podemos terminar con el flujo ilegal de drogas, dinero y armas entre nuestros países", añadió.

Sin embargo, las relaciones comerciales de Estados Unidos con México y Canadá muestran escenarios totalmente diferentes.

Con México, Estados Unidos tiene un gigantesco déficit comercial, que en el 2016 alcanzó los US$ 63,000 millones y que en los tres primeros trimestres del 2017 llegó a los US$ 52,000 millones de la moneda estadounidense.

En tanto, con Canadá Estados Unidos tuvo en el 2016 un superávit de unos US$ 8,000 millones, y que en los tres primeros trimestres del 2017 alcanzó a los US$ 3,000 millones.

Europa se prepara
Pero las tensiones seguían acumulándose el lunes aún más allá de América del Norte.

Al tiempo que la Unión Europea (UE) preparaba un plan de represalias a las eventuales tarifas estadounidenses, el gobierno de Alemania expresó su convicción de que Washington tomó el "camino equivocado".

"No queremos que empeore la situación y en absoluto queremos algo que se acerque a una guerra comercial" que no convendría a nadie, declaró Steffen Seibert, portavoz de la canciller alemana Angela Merkel, en Berlín.

En tanto, el presidente de Francia, Emmanuel Macron, dijo en una conferencia de prensa que la UE debería "reaccionar rápidamente" ante la amenaza de las tarifas estadounidenses al acero y al aluminio.

"Está claro que (estas medidas) violarían las normas de la OMC (Organización mundial del Comercio): la UE tendría el derecho, y tal es el deseo de Francia, de llevar a cabo una acción ante la OMC para adoptar medidas" de represalia, dijo.

El domingo, la oficina de la primera ministra británica, Theresa May, informó que la dirigente está "profundamente preocupada" por el anuncio sobre las tarifas, y que le manifestó directamente esa preocupación a Trump en una conversación telefónica.