La presidenta y el vicepresidente de la Convención Constituyente de Chile, María Elisa Quinteros y Gaspar Domínguez, respectivamente, elevan el proyecto final de propuesta de nueva Constitución, el 4 de julio de 2022. (JAVIER TORRES / AFP).
La presidenta y el vicepresidente de la Convención Constituyente de Chile, María Elisa Quinteros y Gaspar Domínguez, respectivamente, elevan el proyecto final de propuesta de nueva Constitución, el 4 de julio de 2022. (JAVIER TORRES / AFP).

Cuando los manifestantes enojados y ocasionalmente violentos tomaron las calles de Santiago, capital de Chile, en el 2019 y 2020, sus quejas fueron múltiples. Los estudiantes marcharon contra las costosas matrículas; otros se manifestaron en contra del sistema privado de pensiones del país y el servicio de salud raído. Muchos culparon de los males de Chile a un documento: la Constitución adoptada en 1980 bajo Augusto Pinochet, el dictador que gobernó de 1973 a 1990.