Hamdi Ulukaya.
Hamdi Ulukaya.

Hamdi Ulukaya, inmigrante turco que utilizó un pequeño préstamo comercial para construir una de las marcas de yogur más vendidas en Estados Unidos, tiene un plan para resolver la creciente crisis mundial de refugiados: darles trabajo.

Durante un viaje a Colombia donde se reunió con líderes empresariales y , el multimillonario fundador del productor de yogur tipo griego Chobani LLC dijo que las compañías tienen la responsabilidad de ayudar a resolver la emergencia mundial de refugiados.

"Lo principal es la contratación, un trabajo", dijo en una entrevista en Bogotá. "Para un refugiado, es el punto clave. Es el momento en el que se da cuenta que su vida puede continuar".

Ulukaya, de 46 años, demuestra su apoyo con acciones. Chobani tiene como política emplear refugiados en sus plantas de EE.UU. y Ulukaya ha vertido gran parte de su fortuna personal en la asociación para refugiados Tent Partnership for Refugees, organización benéfica que él mismo fundó. Desde entonces, se ha dedicado a viajar para reclutar a líderes empresariales, con el ánimo de ejercer presión para que tengan en consideración a los refugiados al contratar empleados.

"Es bueno que las empresas formen parte de esto", dijo. "Porque dentro de cinco o diez años las personas preguntarán ’¿Qué hiciste al respecto? ¿Por qué no formaste parte de esto?’"

La Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR) estima que la población mundial de personas desplazadas a la fuerza, que incluye a refugiados y otros migrantes, ha aumentado casi en 70% en la última década a aproximadamente 71 millones.

Cerca de 4 millones de venezolanos han huido de una crisis económica y humanitaria en su tierra natal. Aproximadamente 1.4 millones se han radicado en Colombia, un país de 49 millones que ha pedido a los donantes internacionales que le ayuden a cubrir los crecientes costos.

Venezuela

Ulukaya dijo que un número "significativo" de empresas en las industrias de bienes y servicios con operaciones en América Latina han acordado unirse a él para ayudar a los migrantes venezolanos en Colombia con empleo y otras iniciativas. Anunciarán sus compromisos el próximo mes en Nueva York para así coincidir con el primer día de la Asamblea General de las Naciones Unidas.

Criado en una familia de productores de leche en Turquía, Ulukaya compró una fábrica cerrada de Kraft Foods Inc. en el norte del estado de Nueva York y lanzó su compañía en 2007 con un préstamo de la Administración de Pequeños Negocios de EE.UU. Convirtió el yogur cuchareable Chobani en una marca familiar famosa en EE.UU., donde es el yogur número uno en ventas, según datos compilados por Bloomberg.

La compañía estrechamente controlada ha tenido dificultades en los últimos años ya que las ventas de yogur griego disminuyeron y la competencia aumentó. El bono con vencimiento en el 2025 del fabricante de yogurt cotizaba por debajo de 80 centavos por dólar a fines del 2018 antes de recuperarse a aproximadamente 93 centavos este mes.

La firma de capital privado TPG Capital prestó a Chobani US$ 750 millones en el 2014 y recibió garantías que podrían haberse convertido en capital. Chobani pagó a TPG el año pasado con la venta de una participación accionaria de 20% a Healthcare of Ontario Pension Plan, que Ulukaya describió como un “inversionista minoritario a largo plazo”.

Las ventas mejoraron en el 2019 y los ingresos anuales son de US$ 1,500 millones aproximadamente, dijo la compañía. Ulukaya indicó que por ahora no ve la necesidad de convertir a Chobani en una empresa pública. En cambio se centrará en el lanzamiento de nuevos productos “en categorías donde nunca hemos estado antes”, sin dar detalles sobre los productos o la fecha.

"No estoy en contra de una OPI", dijo. "Solo quiero hacerlo por la razón correcta y en el momento adecuado".

El patrimonio neto de Ulukaya se estima en US$ 1,340 millones, según el Índice de multimillonarios de Bloomberg. En el 2015, se afilió a la campaña The Giving Pledge, popularizada por Bill Gates y Warren Buffett, y prometió la mayoría de su riqueza personal para poner fin a la crisis mundial de refugiados.