Las remesas en el tercer trimestre del año superaron los US$800 millones. (Foto: GEC)
Las remesas en el tercer trimestre del año superaron los US$800 millones. (Foto: GEC)

Las enviadas por los migrantes latinoamericanos a sus familias en el 2018 aumentaron 10%, hasta los US$ 84,200 millones, una de las subidas anuales más altas de la última década, impulsada por la migración venezolana, guatemalteca y haitiana, según un estudio de .

"Los números continúan creciendo de manera sustancial", apuntó Manuel Orozco, director del programa de Migración, Remesas y Desarrollo de este centro de estudios.

En el 2016, el ritmo de crecimiento de las remesas había sido de 7.9%, y en el 2017 se elevó al 8.2%.

La tendencia al alza, remarcó el experto, contrasta con el débil crecimiento económico en la región, de apenas un 1.9% en el 2018.

"Venezuela es el caso más chocante; estimamos que los migrantes venezolanos en el extranjero están enviando remesas por valor de US$ 2,000 millones desde al menos seis países", apuntó Orozco.

En concreto, explicó que gran parte de los migrantes venezolanos reciben las remesas mientras están "en tránsito o en estadía temporal" en países como Perú, Colombia o Ecuador.

Esta es la primera vez que el reporte anual, que se basa en datos de los bancos centrales de los países, incluye información de Venezuela.

En esta ocasión, el informe también destacó el creciente flujo de remesas intra-regional, frente a la tradicional migración hacia Estados Unidos.

Como ejemplo, citó a Panamá, país que históricamente no había contado con una gran cantidad de migrantes, pero cuyo número se ha disparado por su bueno momento económico y las crisis de vecinos como Venezuela o Nicaragua.

El año pasado salieron remesas de migrantes desde Panamá por valor de 800 millones de dólares, según el estudio.

Centroamérica sigue siendo otro de los motores en la recepción de remesas, con cuatro países con una tasa de crecimiento de dos dígitos o próxima a ello, como Honduras (10.4%), Guatemala (13.4%), El Salvador (8.5%), y Nicaragua (7.9%).

En estos países el flujo de remesas es especialmente importante ya que representa el 22% del PBI de El Salvador, el 20% de Honduras, el 12% de Guatemala y el 11% de Nicaragua.

Por su parte, Haití sigue a la cabeza del alza en las remesas, con una tasa superior al 17.2%, y cuya economía depende en un 39% de este flujo financiero.