Reino Unido
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El Partido Laborista dio su señal más clara hasta ahora de que sumará fuerzas con los Tories rebeldes para intentar torcerle el brazo a Theresa May respecto al , lo cual amenaza con provocar una crisis política que podría derribar al Gobierno de la primera ministra.

Keir Starmer, el principal portavoz del laborismo sobre el Brexit, señaló que su partido votará modificar uno de los anteproyectos de ley de May a partir del mes que viene para obligarla a mantener al Reino Unido sujeto a las normas de comercio de la

May prometió sacar al de la unión aduanera de la UE para llevar a cabo una política comercial independiente y cerrar acuerdos con países como Estados Unidos y Australia. Por lo tanto, abandonar la unión aduanera es fundamental para su visión del Brexit y para su frágil autoridad política.

“Es evidente que hay un coro cada vez más grande de voces de todos los partidos que opinan que la primera ministra se equivoca con lo de la unión aduanera”, dijo Starmer en entrevista desde la oficina de Bloomberg en Londres. “La cuestión de la unión aduanera está llegando a un punto crítico”.

Exigencias fundamentales
Librarse de las normas de comercio es una exigencia fundamental de los simpatizantes del Brexit, entre ellos el secretario de Asuntos Exteriores Boris Johnson, visto como rival de May por su cargo. Otros Tories que apoyan intransigentemente el Brexit insinuaron que podrían retirarle el apoyo a su liderazgo si ella no saca al país de la unión aduanera como prometió.

Del otro lado, el laborismo, los líderes empresariales y los Tories que apoyan la UE quieren que el país permanezca en la unión aduanera. Dicen que la industria británica sufrirá, que se perderán empleos e incluso que la perspectiva de levantar barreras a los bienes que cruzan la frontera con Irlanda podría socava la paz.

La cuestión llegará a un momento de definición cuando los miembros del Parlamento debatan la Ley de Comercio, lo cual se espera para el mes que viene. Anna Soubry, una conservadora que se opone al Brexit, propuso agregar una nueva cláusula a la legislación.

Esta obligaría al Gobierno a “tomar todas las medidas necesarias para implementar un acuerdo de comercio internacional que le permita al Reino Unido participar en una unión aduanera con la UE tras el día de la separación”.

Starmer dijo que su partido podría apoyar la enmienda de Soubry —aunque dijo que aún no se había decidido nada— en tanto el texto “refleja la posición” fijada por el líder de los laboristas, Jeremy Corbyn.

“El tema de la unión aduanera se votará de una forma u otra y, por ende, llegará a un punto límite”, dijo Starmer. “Si será en esta enmienda o aquella o en tal o cual proyecto de ley ya no es relevante”.