Xi Jinping, presidente de China. (Foto: EFE)
Xi Jinping, presidente de China. (Foto: EFE)

Los negociadores comerciales de China y Estados Unidos mantienen una comunicación efectiva, dijo el viernes el Ministerio de Relaciones Exteriores del país asiático, a menos de 48 horas de que entre en vigor una nueva ronda de aranceles estadounidenses por US$ 125,000 millones sobre bienes chinos.

La guerra comercial entre las mayores economías del mundo ha involucrado gravámenes sobre los bienes de cada país por valor de cientos de miles de millones de dólares y ha amenazado el crecimiento global. La incertidumbre sobre cuándo o cómo podría terminar la disputa ha agitado los mercados y ha complicado los planes de inversión a largo plazo de las empresas.

Estados Unidos comenzará a cobrar un arancel del 15% sobre bienes chinos valorados en US$ 125,000 millones a las 0401 GMT del domingo, entre ellos a relojes inteligentes, televisores de pantalla plana y calzado.

Estados Unidos ha impuesto hasta ahora aranceles a productos chinos valorados en 250,000 millones de dólares desde que comenzó la guerra comercial en 2018.

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, negó el viernes que los aranceles estuvieran afectando la economía de su país. “No tenemos un problema de aranceles (...) tenemos un problema con la Fed”, escribió el mandatario en Twitter.

Trump ha criticado a la Reserva Federal y a sus líderes por no reducir aún más las tasas de interés para estimular la economía.

El mandatario dijo también que General Motors debería comenzar a trasladar sus operaciones en China, donde inició empresas conjuntas en 1997, de regreso a Estados Unidos.

“General Motors, que una vez fue el Gigante de Detroit, ahora es uno de los fabricantes de automóviles más pequeños allí. Trasladaron las principales plantas a China ANTES DE QUE ASUMIERA”, tuiteó Trump. “Esto se hizo a pesar de la ayuda vital que le dio Estados Unidos. ¿Ahora deberían comenzar a regresar a Estados Unidos nuevamente?”.

Las conversaciones comerciales bilaterales también podrían complicarse por la respuesta de Pekín a las protestas generalizadas en Hong Kong. Trump dijo que cree que el presidente chino, Xi Jinping, desea lograr un acuerdo comercial, pero que debería “resolver rápida y humanamente el problema de Hong Kong”.

La policía de Hong Kong arrestó el viernes a varios activistas prodemocracia antes de una manifestación masiva prevista para este fin de semana. A principios del verano boreal, Pekín rechazó una propuesta del gobierno hongkonés para apaciguar a los manifestantes.