:quality(75)/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/elcomercio/FUTP3ESMT5D55BXEKNMOQRKP3M.jpg)
El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, anunció la creación de un órgano público, llamado Gas Bienestar, que prevé suministrar este combustible a un “precio justo”.
El mandatario explicó que si bien Petróleos Mexicanos (Pemex) vende el gas a un determinado precio, las empresas privadas de suministro lo ofrecen “al consumidor a un precio muy elevado”.
Explicó que se establecerá un mecanismo de precio máximo, pero también se está “preparando” la “creación de una empresa para distribuir gas a precio justo”.
La empresa se llamará “Gas Bienestar”, apuntó, y se venderán cilindros de 20 y 30 kilos a “precios bajos” en los barrios “sin que estas otras empresas particulares dejen de participar”.
Pero así va “a haber competencia, porque no hay”, y calificó de “cero a la izquierda” la Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece), el ente regulador en la materia.
López Obrador dio este anuncio cuando hablaba de fortalecer la “economía popular” y defendía su modelo de gestión, hablando de que los datos de empleo son “extraordinarios” con 200,000 puestos formales en los primeros días de julio, citando datos del Seguro Social.
Vamos a “controlar aumentos injustificados” de algunos insumos y alimentos que afectan la economía popular, remarcó.
En este contexto, explicó que no había podido “cumplir” con su “compromiso” de que los precios de los energéticos no subieran de costo por encima de la inflación debido al gas, pues ni la luz ni la gasolina había aumentado tanto.
Y recordó que solo cinco empresas grandes distribuyen casi 50% del gas LP y obtiene un amplio margen de beneficio.
Desde que llegó al poder en el 2018, el presidente Andrés Manuel López Obrador tiene una encrucijada con las firmas energética privadas, a las que acusa, entre otros asuntos, de haber “saqueado” la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y Pemex.