El canciller de México Marcelo Ebrard. (OLIVIER DOULIERY / AFP).
El canciller de México Marcelo Ebrard. (OLIVIER DOULIERY / AFP).

La crisis del Perú, agravada por la decisión del presidente Pedro Castillo de disolver el Parlamento, provocó la suspensión de la Cumbre de la Alianza del Pacífico, anunció el gobierno mexicano, que pidió “respeto a la democracia y los derechos humanos” en ese país.

Dados los últimos acontecimientos en Perú, se ha convenido posponer la Cumbre de la Alianza del Pacífico que tendría verificativo el próximo 14 de diciembre en la Ciudad de Lima”, anunció el canciller mexicano, Marcelo Ebrard, en Twitter.

En un mensaje posterior, el diplomático dijo que México lamentaba los últimos acontecimientos en Perú y que hacía “votos por el respeto a la democracia y a los derechos humanos en bien de ese entrañable pueblo hermano”.

El presidente izquierdista de México, Andrés Manuel López Obrador, ha sido uno de los más férreos defensores de Castillo, denunciando incluso que es víctima de una tentativa golpista.

La Cumbre de la Alianza del Pacífico -organismo que reúne a Chile, Perú, México y Colombia- debía realizarse en la capital mexicana del 24 al 26 de noviembre pasado, pero fue suspendida luego de que el Congreso peruano le negara a Castillo el permiso para asistir.

Posteriormente se acordó que la reunión, en la que Perú debe recibir de México la presidencia pro tempore, se realizara en Lima.

López Obrador ha salido varias veces en defensa de Castillo, asegurando que detrás de la crisis peruana hay un plan de golpe de Estado.

“El presidente Castillo ganó elecciones democráticas, pero no lo dejan. Lleva poco tiempo y lo han estado hostigando”, afirmó recientemente.

En medio de uno de los intentos de destitución de Castillo en el Congreso, medios de prensa llegaron a especular con la posibilidad de que Castillo se refugiara en México.

Este país ha dado asilo a perseguidos políticos de todo el mundo, desde el revolucionario ruso León Trotski hasta izquierdistas sudamericanos como la viuda del chileno Salvador Allende y republicanos españoles, como el cineasta Luis Buñuel.

Evo Morales fue recibido en México el 12 de noviembre del 2019, luego de renunciar a la presidencia de Bolivia en medio de una crisis política.