El Senado también es dominado por el oficialista y se anticipa que las modificaciones a la ley minera sean aprobadas de manera expedita. (Foto: RONALDO SCHEMIDT / AFP).
El Senado también es dominado por el oficialista y se anticipa que las modificaciones a la ley minera sean aprobadas de manera expedita. (Foto: RONALDO SCHEMIDT / AFP).

dio un paso este lunes hacia la nacionalización del luego de que diputados aprobaron una reforma que excluye a privados en explotaciones de ese mineral esencial para baterías de autos eléctricos y nuevas tecnologías.

La reforma a la ley minera, que aún debe ser discutida por el Senado, fue aprobada por 298 votos con el respaldo del partido oficialista Morena, sus aliados y el opositor Movimiento Ciudadano.

La propuesta fue enviada la noche del domingo al Legislativo por el presidente Andrés Manuel López Obrador justo después de que fracasara en la Cámara de Diputados su iniciativa de modificar la Constitución para el sector energético, para lo que se necesitaban dos tercios de los votos.

Pero la reforma a la ley minera, al ser secundaria, requería el voto de la mitad de los 500 escaños y Morena y sus aliados cómodamente consiguieron incluso que se excusara todo trámite legislativo para aprobarla en cuestión de horas.

El texto enviado por López Obrador señala al litio como patrimonio de la nación y deja su explotación y aprovechamiento en manos de una empresa del Estado, sin participación de privados, sean nacionales o extranjeros.

Gobiernos anteriores extendieron ocho concesiones, pero en la reforma no se detalla si se mantendrán vigentes. López Obrador ha señalado que se respetarán los permisos si los privados acreditan que están por empezar la producción.

La fracasada iniciativa de reforma constitucional al sector eléctrico contemplaba la nacionalización del litio, además de que reservaba al menos el 54% de la producción de energía a la estatal Comisión Federal de Electricidad contra el 38% que maneja actualmente.

Los esfuerzos de López Obrador por reformar el marco legal en materia energética son rechazados por los gobiernos y firmas de Estados Unidos, Canadá (socios de México en el tratado comercial A-ME) y España, que los consideran contrarios a las inversiones.

El Senado también es dominado por el oficialista y se anticipa que las modificaciones a la ley minera sean aprobadas de manera expedita.

México tiene proyectos en fase exploratorio, el más avanzado en el estado de Sonora (norte), pero según expertos el proceso para que sea rentable puede tomar hasta dos décadas.