Ildefonso Guajardo
Ildefonso Guajardo

Centrada en puntos claves como las reglas de origen en el sector automotriz, la sexta ronda de negociaciones del TLCAN será decisiva para un México que juega con una ligera ventaja: los mercados parecen menos asustados ante el persistente parloteo de Donald Trump.

El ministro de Economía de México, Ildefonso Guajardo, dijo este lunes desde Montreal, donde del 23 al 29 de enero tiene lugar la nueva tanda de reuniones, que la ronda será "crítica" porque se tienen que "decidir" algunos elementos, "cerrar" algunos capítulos, e "intercambiar ideas creativas en otros".

Las declaraciones, previas a una reunión con la ministra de Asuntos Exteriores de Canadá, Chrystia Freeland, denotan que en la sexta ronda se está llegando "al hueso" de este convenio firmado en 1994, dijo hoy a Efe el profesor de la Escuela de Gobierno del Tecnológico de Monterrey Carlos Elizondo.

"Vamos a ver hasta dónde está dispuesto Estados Unidos a aceptar algunas soluciones propuestas por México", apuntó el experto.

Es el caso de la cláusula "sunset", en la que México apuesta por una revisión quinquenal del tratado y una evaluación de salida de uno de los países, que en ningún caso sería inmediata como pedía Estados Unidos.

Pero el meollo del TLCAN es el capítulo automotriz, y todo parece indicar que en estas conversaciones se atacarán de lleno las polémicas reglas de origen, que buscan garantizar el uso de productos fabricados en la región.

Ello hará "complicadas" las negociaciones porque el sector automotriz es la causa principal del déficit comercial de Estados Unidos con México, y la primera potencia mundial busca recuperar parte del pastel asegurándose que su porcentaje de participación en las autopartes sea superior, explicó Elizondo.

En las últimas semanas, la posible salida unilateral del TLCAN por parte de Estados Unidos volvió a encender las alarmas y el peso mexicano cayó hasta las 19,38 unidades por dólares el 10 de enero, coincidiendo con rumores sobe el fin del tratado.

Pero desde entonces la moneda se ha recuperado sustancialmente, cerrando este lunes en 18,72 pesos por dólar.

Aunque hay nerviosismo y cautela, "el mercado ya no toma tanto en cuenta lo que dice Donald Trump, de otra forma el tipo de cambio se mantendría por arriba de los 19 pesos por dólar", señaló a Efe la directora de Análisis Económico y Financiero en Banco Base, Gabriela Siller.

Para Elizondo, es muy relevante la presión que se está haciendo desde los propios Estados Unidos, donde "intereses potencialmente afectados por una salida", junto con miembros del Congreso y la propia Casa Blanca, han actuado para "minimizar el riesgo".

"Hay esta percepción que los intereses económicos afectados son suficientemente fuertes para evitar el desenlace (la salida)", remarcó.

Desde México, políticos y representantes de la iniciativa privada llevan meses de cabildeo con sus homólogos estadounidenses.

Desde el Consejo Coordinador Empresarial (CEE), una de las patronales más importantes de México, se celebraron solo en 2017 unas 250 reuniones con gobernadores, congresistas, senadores, funcionarios de la Casa Blanca y empresarios.

Aunque no afecte directamente en las negociaciones, el equipo de Trump llega a esta ronda con la polémica del cierre parcial del Gobierno estadounidense, incapaz de aprobar un presupuesto por la falta de consenso entre republicanos y demócratas, un hecho que coincide con el primer aniversario del presidente republicano en la Casa Blanca, lo que de alguna forma debilita al temperamental mandatario.

Todo ello impregna de un sutil optimismo esta nueva ronda.

"Soy positivo pensando en que los equipos negociadores van a lograr buenas soluciones, que serán de beneficio trilateral", explicó a Efe el director general de la firma E.J. Krause Tarsus en México, José Navarro.

El especialista en comercio internacional destacó que muestra de esta confianza por México -y la continuidad del TLCAN- es el apetito inversor en el sector manufactura, que este año podría generar 200.000 nuevos empleos pese a la incertidumbre todavía existente.

A la espera de los resultados de esta nueva ronda -que para Siller definirá el "triunfo o fracaso" del proceso- cada vez parece más probable que las negociaciones se alarguen después de marzo, incluso más allá de las elecciones presidenciales de México en julio.

Tampoco se descartan nuevos giros de guion. Elizondo recordó que el mandatario estadounidense parece últimamente mirar hacia Asia, y podría "enfilar sus instintos proteccionistas contra China", lo que dejaría el TLCAN en un segundo plano.