Uno de los motivos que alegan algunas fuentes comunitarias para postergar la decisión sobre la equivalencia es que el Reino Unido podría divergir de la normativa europea y desregular el sector financiero para su beneficio. (Photo by Tolga AKMEN / AFP)
Uno de los motivos que alegan algunas fuentes comunitarias para postergar la decisión sobre la equivalencia es que el Reino Unido podría divergir de la normativa europea y desregular el sector financiero para su beneficio. (Photo by Tolga AKMEN / AFP)

El sector financiero del Reino Unido pide a la Unión Europea “pragmatismo” al decidir si le concede acceso a su mercado y al abordar los “cabos sueltos” del Brexit, según explica en una entrevista con Efe Catherine McGuinness, líder política de la Corporación de la City de Londres.

Podemos entender la política, las intensas emociones tras las negociaciones de los últimos años y el deseo de extraer más negocio, pero yo le diría a la UE que la inacción está dañando a las empresas y los clientes justo cuando necesitamos que los mercados funcionen bien”, declaró la responsable del consistorio del distrito financiero londinense.

Sin ocultar su “decepción” por que el acuerdo comercial británico-comunitario sea tan “pobre” en servicios financieros, McGuinness urge al bloque a “trabajar juntos como competidores pero también como socios” para impulsar un diálogo que permita “afrontar retos comunes”, como la recuperación pospandemia, la financiación ecológica y la digitalización de la economía.

EQUIVALENCIA, FLUJO DE DATOS Y CÁMARAS DE COMPENSACIÓN

Seamos pragmáticos sobre las decisiones que tendrían que ser pragmáticas, como el reconocimiento de la equivalencia” regulatoria que otorgaría a las firmas británicas acceso al mercado comunitario, señala la abogada y política.

En opinión de McGuinness, la UE “se está tomando su tiempo” para conceder al Reino Unido el régimen de equivalencia -que este país ya garantizó por su parte el pasado noviembre- para lograr “una ventaja competitiva” con la esperanza de que “más empresas se trasladen” a suelo comunitario.

Sin embargo, apunta: “Los indicios del último par de semanas no son que las empresas estén yéndose a la UE”, sino que “más bien se ha notado un mayor comercio de derivados en Nueva York”.

Deberíamos estar facilitando que los mercados operen de la mejor manera posible, y no existe ninguna razón pragmática para que la UE trate al Reino Unido de forma diferente a como trataría a cualquier otro país que pidiera la equivalencia”, afirmó.

Al fin y al cabo, nosotros ya nos ajustamos a la normativa: ayudamos a elaborarla”, mantuvo.

Otros flecos pendientes del proceso del Brexit que requieren “atención inmediata” son acordar un marco duradero para el flujo de datos y para que puedan seguir operando las cámaras de compensación con sede en el Reino Unido, indicó.

Además, los Veintisiete deben aprobar el acceso de este país a la Convención de Lugano, a fin de clarificar la jurisdicción británica sobre posibles disputas.

LA CITY NO QUIERE DESREGULACIÓN

Uno de los motivos que alegan algunas fuentes comunitarias para postergar la decisión sobre la equivalencia es que el Reino Unido podría divergir de la normativa europea y desregular el sector financiero para su beneficio.

Existe la idea equivocada de que queremos convertirnos en un ‘Singapur sobre el Támesis’, pero nosotros siempre hemos sido muy claros, no hay un llamamiento para la desregulación”, asegura McGuinness.

Lo que sí piden las empresas de servicios financieros y profesionales, motor de la economía británica, es que el Gobierno del primer ministro, Boris Johnson, plantee una visión estratégica sobre cómo puede desarrollarse el sector ahora que no está bajo el paraguas de la UE.

Sobre la sospecha, recurrente en la prensa, de que los conservadores planean desregular la City y convertir el país en un paraíso fiscal, McGuinness afirma que “no se trata de hacer trizas el reglamento” vigente.

Yo espero que el Gobierno esté buscando maneras de mejorar la regulación para impulsar la innovación”, por ejemplo en industrias en ascenso como las finanzas ‘verdes’ para proyectos de desarrollo sostenible y las “FinTech” de tecnología financiera, señala.

Añade que la City también ansía ver “avances” en la negociación con los Veintisiete para el Memorando de Entendimiento anticipado en el pacto firmado en diciembre, que ha de “sentar las bases para un mecanismo de diálogo sobre desafíos regulatorios comunes”.

REFORMA DE LOS MERCADOS BURSÁTILES

El sector financiero británico, ubicado principalmente en el distrito capitalino conocido como la City, espera además con interés el resultado de un informe gubernamental sobre posibles reformas en la Bolsa de Londres, a fin de facilitar el acceso a las empresas emergentes.

Como estratega política de la “Milla Cuadrada”, McGuinness trata asimismo de fortalecer los lazos con Estados Unidos y Asia, para lo que será clave, subraya, la presidencia británica este año del G7 o grupo de las mayores democracias ricas y de la cumbre del clima de la ONU COP26.

Pese a la tensión con la UE y los innegables retos que plantea la pandemia, la “embajadora” del distrito de las finanzas se muestra confiada en que, “gracias a su fortaleza intrínseca y su capacidad de innovación, a largo plazo la City prosperará”.