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El sindicato FIFPro denunció el impacto de la pandemia sobre las futbolistas, expuestas a recortes salariales y a la pérdida de sus puestos de trabajo.
A través de una encuesta realizada a jugadoras de 62 países entre los meses de julio y octubre, FIFPro concluyó que “los recientes avances hacia la igualdad de género en el deporte están potencialmente en riesgo” atendiendo a las consecuencias que está teniendo sobre las futbolistas la pandemia.
El sindicato informó de que “en el 47% de los países analizados, las futbolistas tienen sus salarios cortados o suspendidos”. En el 27% de los países, “el apoyo financiero ha sido reducido o eliminado”, mientras que en el 24% de los casos “los contratos han finalizado o se han visto alterados”, en lo que concierne a comidas, alojamiento, seguro médico o uso del gimnasio.
Además, FIFPro reveló que, en el 84% de los países estudiados, “las jugadoras no recibieron apoyo para la salud mental” y que en el 66% de ellos “las jugadoras no recibieron apoyo para la salud física”, por ejemplo, para el tratamiento de lesiones.
Por otra parte, consideró que la comunicación de los clubes, ligas y federaciones con las jugadoras “no es suficiente”.
El sindicato sí pondera, en cambio, algunas iniciativas llevadas a cabo en Italia, Argentina, Países Bajos y Estados Unidos.
La federación italiana empezó a trabajar con las autoridades gubernamentales por el estatus profesional de la liga femenina. La federación argentina anunció un plan de cinco años para extender el profesionalismo de la liga femenina.
En Países Bajos, las jugadoras consiguieron que el gobierno valorase la reanudación de su torneo del mismo modo que el masculino. En la NWSL estadounidense, la asociación de jugadoras y la liga negociaron para ver garantizados aspectos como el salario o la vivienda.
En base a este estudio, la directora de fútbol femenino de FIFPro, Amanda Vandervort, concluyó que “el fútbol femenino se está viendo gravemente afectado por el impacto de la pandemia de COVID-19”.
“Los resultados reflejan lo que hemos dicho desde el principio: que las jugadoras y el juego necesitan apoyo estratégico para superar estos tiempos difíciles”, apuntó.
“Con ese fin también identificamos grandes casos de innovación y avance en los que las nuevas soluciones están mostrando el potencial único del fútbol femenino, para prosperar hoy y en el futuro”, subrayó.
Por su parte, el director general del sindicato, Jonas Baer-Hoffmann, reparó en la necesidad de “una acción más concentrada” en el mundo del fútbol. “Existe el peligro real de que el progreso hacia la igualdad de género en el fútbol retroceda años”, alertó.