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Las cadenas de suministro mundiales están experimentando un cambio “tectónico” y apuntan a un futuro prometedor para la fabricación, y un auge en la automatización y la producción de América del Norte.
Según una encuesta de Bank of America Global Research de sus analistas de renta variable, que cubren más de 3,000 compañías en todo el mundo, más del 80% de las compañías han ejecutado o anunciado planes para cambiar al menos una parte de sus cadenas de suministro. La muestra incluye 12 industrias con una capitalización de mercado total de US$ 22 billones, que incluye software, bienes de capital, hardware tecnológico y alimentos y bebidas.
“Estos movimientos son ‘tectónicos’: lentos, persistentes, con cambios importantes en el entorno empresarial para las empresas globales”, señalaron los analistas de BofA, dirigidos por la jefa de análisis mundial, Candace Browning, en un comentario.
Si bien el nerviosismo por la guerra comercial y las preocupaciones de seguridad nacional se encontraban entre las razones citadas ya anticipadas, las empresas también mostraron la necesidad de redefinir el diferencial de los costes laborales hacia la automatización y el alejamiento de las viejas formas de mano de obra barata. Las empresas también manifestaron el deseo de reducir sus huellas de carbono.
Los analistas también señalan a Norteamérica y los robots como dos ganadores inesperados de estos cambios:
Norteamérica
El sudeste de Asia, particularmente Vietnam, y la India fueron beneficiarios de la encuesta, pero “más sorprendente fue que las empresas en aproximadamente la mitad de todos los sectores mundiales en América del Norte declararon su intención de “volver a casa”. Se seleccionaron destinos de América del Norte en sectores de alta tecnología y para aquellos que dependen de la energía como insumo clave.
“Desde nuestro punto de vista, Estados Unidos podría ser un beneficiario significativo de este proceso, mientras que las empresas chinas tal vez estén en mayor riesgo”, según el informe de BofA.
Conforme más empresas recurren a localizaciones en América del Norte, el alejamiento de China que comenzó hace una década deberían continuar, señalan los analistas.
Robots
Los resultados de la encuesta también mostraron una “intención casi universal de utilizar la automatización”, lo que llevó a los analistas de BofA a preguntarse si su pronóstico actual de duplicar los robots industriales a 5 millones de unidades para el 2025 es demasiado conservador.
Según el informe, un mayor gasto en automatización y fabricación tendría efectos multiplicadores en la economía en general y sería beneficioso para los servicios financieros relacionados. También podrían resultar en salarios más altos, mayor gasto en investigación y desarrollo, más ingresos fiscales y grupos industriales más fuertes.
Las batallas comerciales globales aún podrían determinar el destino de los ganadores y perdedores de esta evolución.