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Las elecciones locales y regionales del domingo en Colombia confirmaron la crisis de los partidos políticos tradicionales que han perdido la conexión con un electorado hastiado de la corrupción y el inmovilismo para responder a sus necesidades.
La posición dominante de los partidos cedió espacio en todo el país a las coaliciones, los movimientos ciudadanos y los independientes como nuevas formas de representación política.
"Fue un fracaso absoluto de todos los partidos, sin excepción, los partidos demostraron que hoy en día no interpretan el sentimiento de la ciudadanía, demostraron una decadencia muy grande del respaldo ciudadano", dijo este lunes a Efe el exministro y exsenador liberal Juan Fernando Cristo.
Avance de coaliciones
En esto los números son claros: de las 32 gobernaciones en juego, solo seis fueron ganadas por partidos en solitario, mientras que una quedó en manos de un movimiento ciudadano y en las 25 restantes triunfaron coaliciones que en algunos casos abarcan todo el arco político del país, según el escrutinio prácticamente terminado.
Ganaron por su cuenta el Partido Liberal (Córdoba y Sucre), el Centro Democrático (Casanare y Vaupés), el Partido de La U (Guainía) y el Conservador (Caquetá), mientras que el movimiento Fuerza Ciudadana se impuso en el Magdalena.
Esos resultados muestran que en los otros 25 departamentos, incluidos grandes colegios electorales, como Antioquia, Cundinamarca, Valle del Cauca y Atlántico, se impusieron las coaliciones.
"En muchos departamentos se tuvieron que juntar todos los partidos para tratar de salvar unas gobernaciones", añadió Cristo.
El mismo fenómeno se dio en las Alcaldías de capitales departamentales, en las cuales 13 coaliciones resultaron ganadoras, y el resto se pulverizó, siendo el partido Alianza Verde, que ha innovado en la forma de hacer política, el más beneficiado al obtener las de Bogotá, Cali, Manizales, Cúcuta y Florencia.
Los movimientos ciudadanos se impusieron en tres, un independiente ganó en Medellín y las otras nueve quedaron con distintos partidos que sin embargo se proclaman vencedores al sumar su participación en coaliciones.
Cuentas alegres
"Cambio Radical es el Partido con más gobernaciones, obtuvimos 16, con este resultado nos consolidamos como la primera fuerza política regional", anunció su dirigencia en Twitter, donde también destacó: "ningún otro partido supera los resultados de Cambio Radical en las capitales, donde logramos 7 alcaldías".
El Partido de la U publicó por su parte que “gana 15 gobernaciones” y el Liberal se atribuyó siete que le permiten proclamarse “primera fuerza política regional en Colombia” con “más de 2′600,000 votos, mayor número de gobernaciones y Alcaldías a nivel nacional”.
Pero los números no mienten y si se suman solo las que reclaman esos tres partidos daría 38 gobernaciones, seis más que las que tiene el país.
"En fin, creo que sin lugar a dudas después del Centro Democrático (partido de Gobierno) los otros grandes derrotados son los partidos tradicionales", opinó Cristo.
El caso del Centro Democrático es especialmente significativo porque a pesar de la campaña que hizo en todo el país su líder, el expresidente Álvaro Uribe, al final solo ganó las gobernaciones de Casanare y Vaupés y ninguna alcaldía de ciudad capital.
Sube el voto en blanco
Las elecciones mostraron también que la disconformidad del electorado con la clase política se manifiesta en el crecimiento del voto en blanco que, en el caso de las gobernaciones, superó los 1.8 millones (11.18 %) y para alcaldes llegó a 1.08 millones (5.08 %).
Mayor aún fue en las listas para las asambleas departamentales, con 2.5 millones de votos, equivalentes al 16.35 %.
En algunas gobernaciones, como la de Bolívar, el voto en blanco quedó en segundo lugar con 199,359 papeletas (24.27 %), y fue tercero en Antioquia con 305,119 equivalentes al 13.24 %; Atlántico, con 91,910 sufragios (8.9 %) y Magdalena, con 27,737 votos (4.40 %).
En la disputa de la Alcaldía de Barranquilla el voto en blanco fue segundo, con 79,852 papeletas (16.12 %) y en Cartagena de Indias, donde ganó el casi desconocido William Dau, que basó su campaña en las redes sociales, quedó en tercer puesto con 61,250 votos (15.56 %).