El Grupo de Lima pidió a Naciones Unidas que se movilice para responder a la crisis humanitaria que se vive en Venezuela y que trabaje con la Asamblea Nacional y su jefe, el opositor Juan Guaidó, ante el carácter ilegítimo del Gobierno de Nicolás Maduro.
Diplomáticos de once países del Grupo se reunieron con el secretario general de la ONU, António Guterres, y le entregaron la última declaración adoptada por sus miembros este mes en Santiago de Chile.
Tras la cita, la primera de este tipo entre el Grupo de Lima y Guterres, el embajador de Perú ante Naciones Unidas, Gustavo Meza-Cuadra, subrayó que la crisis supone una "amenaza a la paz y seguridad" y "sigue agravándose", con un impacto muy importante para los países de la región.
"Le hemos pedido que haga el mayor esfuerzo para que todo el sistema se movilice en todo el ámbito que le corresponde para atender de manera urgente esta crisis sin precedentes", explicó el diplomático.
Según Meza-Cuadra, el Grupo de Lima urgió además a que se garantice que "no haya un aprovechamiento político de la asistencia humanitaria", al considerar que la poca ayuda que ha llegado "está siendo utilizada por el régimen de Maduro".
El Grupo de Lima pidió también apoyo para los Estados que están recibiendo el éxodo masivo de venezolanos que dejan el país y defendió ante Guterres la ilegitimidad del régimen.
"Es necesario que Naciones Unidas también interactúe con el único órgano realmente legal y democrático, que es la Asamblea Nacional y su representante legítimo, el presidente encargado, el señor Guaidó", apuntó Meza-Cuadra.
"Creemos que cualquier hecho que ayude al régimen es contrario a lo que se busca, que es una salida por la vía pacífica, política y diplomática", insistió, recordando que el Grupo de Lima considera "necesario aislar al régimen".
Pese a la postura de este importante grupo de países americanos y de potencias como Estados Unidos, la ONU sigue trabajando con el ilegítimo régimen de Maduro en cuestiones como el suministro de ayuda humanitaria.
Guterres ha mantenido en todo momento una postura neutral y se ha ofrecido en repetidas ocasiones a mediar en un posible diálogo entre las autoridades y la oposición.
En la reunión de este lunes, los países del Grupo de Lima subrayaron también la "grave situación" de las libertades y los derechos en Venezuela y subrayaron la importancia de que haya "una observación seria y presión sobre el régimen" por parte de la alta comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet.