Federica Mogherini. (Foto: AFP).
Federica Mogherini. (Foto: AFP).

La mostró una extrema prudencia sobre la actitud a adoptar en la , intentando no quemar su iniciativa de diálogo en un país con una fuerte comunidad europea, pero se enfrenta una presión creciente en su seno.

A diferencia de Estados Unidos y la mayoría del Grupo de Lima, la jefa de la diplomacia europea, Federica Mogherini, en nombre de los 28 países, evitó reconocer explícitamente acomo presidente interino del país, pero pidió "elecciones libres y creíbles".

"La UE no reconoce los gobiernos, sólo los Estados", defendió este jueves la vocera de la diplomacia comunitaria, Maja Kocijancic. Pero, como confiesa un diplomático europeo, "la declaración de Mogherini es lo máximo que se podía hacer" unánimemente a 28.

A diferencia de Estados Unidos, que reconoció en menos de 30 minutos la autoproclamación de Guaidó, los europeos tardaron en fijar su posición, que llegó después que el presidente del Consejo Europeo, Donald, Tusk, les urgiera a unirse "en apoyo a las fuerzas democráticas".

"La postura europea es bastante razonable" vista la situación "confusa" y "cambiante", dijo el investigador del Real Instituto Elcano, Carlos Malamud, para quien "tener la cabeza fría y favorecer las posturas más dialogantes no es una mala posición".

"Nuestra posición es más matizada porque el contexto impone la prudencia", explicó el diplomático europeo. Y todo ello pese a que Estados Unidos "había informado previamente de su decisión" de reconocer a Guaidó, reveló otro diplomático europeo.

'Romper todos los puentes'

Desde la muerte de 125 personas entre abril y julio del 2017 en manifestaciones opositoras y la posterior elección de una oficialista Asamblea Constituyente, la UE siempre se ha resistido a romper los canales de comunicación con Maduro, pese a adoptar incluso sanciones.

La vocera comunitaria, que respondió en rueda de prensa a 17 minutos de preguntas sobre Venezuela, confirmó que la opción de lanzar un Grupo de Contacto Internacional para lograr una solución negociada "sigue sobre la mesa", pero se centran "ahora en la situación actual".

Para Malamud, si la UE "reconoce a Guaidó como la única autoridad legítima de Venezuela, eso supone romper todos los puentes con el chavismo" y recuerda que la falta de diálogo entre gobierno y oposición complicó la "salida de dictaduras" en Egipto y Libia.

El experto considera como "una solución posible" ese grupo de contacto y asegura que, ante la polarización lógica de los países americanos a favor o en contra de Maduro, la UE podría apoyarse en socios como México o Uruguay, que tienen "una posición intermedia".

Desde Davos, el mandatario español, Pedro Sánchez, habló este jueves con Guaidó para explicarle la posición de la UE "en favor de la celebración de elecciones libres", que también expuso a los presidentes de Colombia, Ecuador y Costa Rica en la ciudad suiza.

'¡Maduro tiene que irse ya!'

Pero la UE, que tardó en alumbrar el miércoles su posición unánime a 28, empieza a enfrentar la presión interna para reconocer explícitamente a Juan Guaidó como presidente interino, como le piden eurodiputados liberales y de centroderecha en la Eurocámara.

"¡Maduro tiene que irse ya!", aseguró el jefe del parlamento, Antonio Tajani, al anunciar que la Eurocámara, que no participa de la toma de decisiones de los 28 para fijar su política exterior, debatirá la próxima semana sobre la situación en Venezuela.

El jefe del principal grupo parlamentario, el PPE (derecha), Manfred Weber, aseguró que su grupo "reconoce" al opositor como "presidente interino". "La semana que viene pediremos en la Eurocámara que la UE lo reconozca oficialmente también", agregó.

Entre los 28, la presión también aumenta como muestran las palabras del canciller británico, Jeremy Hunt, que aseguró que Maduro "no es el líder legítimo" y que Guaidó "es la persona correcta para sacar a Venezuela adelante", pero sin reconocerlo explícitamente.

El canciller español, Josep Borrell, defendió no obstante en la mañana la necesidad de mantener una posición común en la UE, visto el importante número de españoles en el país, y consideró que "la única salida posible" son "unas elecciones".

La comunidad de europeos y la inestable situación en el país, donde organismos de derechos humanos dan al menos 16 muertos desde el martes en las protestas contra Maduro, también explican la prudencia.

La UE monitorea la situación, máxime cuando Maduro cuenta con el apoyo del ejército y la oposición prevé una gran marcha a inicios de febrero. El bloque advirtió a Caracas contra el uso de la fuerza y que "su posición podría evolucionar", subrayó un diplomático.

Los embajadores europeos en Bruselas deben abordar el viernes el agravamiento de la crisis en Venezuela, asunto que podría estar sobre la mesa de la reunión informal de cancilleres del bloque la próxima semana en Bucarest.