Educadores en Rusia. (Foto: EFE)
Educadores en Rusia. (Foto: EFE)

La profesora de biología Olga Shchegoleva no duró más de seis meses en una prestigiosa escuela de San Petersburgo, de la cual tuvo que irse presionada por ser autora de un blog sobre un signo más del aumento de la intolerancia en .

En el blog, Olga Shchegoleva trata temas como la salud sexual, la anticoncepción y el uso de juguetes sexuales.

Está dirigido a personas adultas, lo que no impidió que varios padres se quejaran ante la dirección de la escuela, que forma parte del prestigioso conservatorio Rimsky-Korsakov de la antigua capital imperial rusa.

Shchegoleva dice que le gustaba su empleo y sus alumnos, pero sintió que no tenía más opción que renunciar.

“Existe la creencia de que los maestros no tienen vida o aficiones fuera del trabajo, y que hay algún estándar ético que no está oficialmente definido pero que los maestros deben seguir”, contó.

El caso de Shchegoleva no es único. La profesora de 31 años es una de cientos de educadores que recientemente fueron despedidos u obligados a renunciar por supuesta conducta inadecuada, una tendencia que refleja la creciente intolerancia y conservadurismo en Rusia bajo el presidente

El Ministerio de Educación no respondió a un pedido de AFP sobre cifras, pero el presidente del sindicato de maestros rusos, Yuri Varlamov, dijo que los tribunales han emitido más de 2,000 sentencias sobre conducta inmoral en los últimos cinco años. La mayoría de los casos involucran a educadores, según Varlamov.

“El despido de maestros por comportamiento inmoral ha sido usado cada vez más por empleadores contra trabajadores indeseados”, aseguró.

La legislación al respecto es imprecisa, lo que deja la puerta abierta para despidos por una amplia gama de motivos.

En un caso destacado, una educadora de la ciudad siberiana de Omsk, quien también era de modelo de talla grande, fue presionada a renunciar cuando aparecieron en internet fotos suyas de tipo “pin-up”.

En el 2021, una maestra de la ciudad siberiana de Novosibirsk fue despedida luego de subir en internet un video en que aparece bailando mientras se quita la ropa hasta quedar en lencería.

Ese mismo año, una profesora de Sebastopol, en la península de Crimea anexada por Rusia, reclamó públicamente sobre su bajo salario. Fue interrogada por autoridades policiales y despedida.

Activistas dicen que hay educadores que han sido despedidos por su orientación sexual o por apoyar a la oposición.

Valores conservadores

Putin, apoyado por la Iglesia Ortodoxa, ha promovido los valores conservadores para generar respaldo entre su base, presentando a Rusia como la antítesis de los valores liberales de Occidente.

En el 2013, Rusia pasó una polémica ley que veda la promoción o exhibición de homosexualidad a menores. Activistas dicen que la ley puede ser usada para perseguir a los homosexuales.

Nikita Tushkanov, un profesor de historia y estudios sociales de Mukin, un asentamiento de la era soviética en el noroeste de Rusia, nunca temió criticar a las autoridades.

Con un brazo tatuado y una tendencia rebelde, el educador de 27 años dice que ha irritado a muchos de sus colegas que ya han pasado la edad de jubilación.

No ocultó su desaprobación por la promoción agresiva de la enseñanza religiosa ortodoxa en las escuelas y la militarización de la sociedad.

Dijo que algunos de sus colegas eran a veces racistas y criticó que los padres eran forzados a dar dinero para comprar materiales que deben ser cubiertos por el estado.

“Nuestro país gasta miles de millones de rublos para adquirir pistolas paralizantes, pero no puede comprar libros de texto para los niños”, declaró Tushkanov.

“Cállese o muera”

Cuando los opositores tomaron las calles para apoyar al detenido crítico del Kremlin Alexéi Navalni en enero del año pasado, Tushkanov hizo una manifestación de una sola persona en Mikun. “Cállese o muera”, decía un afiche en sus manos.

Su protesta por la detención de Navalni fue la gota que derramó el vaso para la escuela, según dijo.

Fue despedido dos meses después y sus intentos de apelar en la justicia terminaron sin éxito. No ha podido encontrar otro empleo.

Cuando intentó entrar a trabajar en una escuela, la directora recibió una llamada de la fiscalía. “Le dijeron que si me contrataba, tendría problemas”, afirma Tushkanov al contar lo que le dijo la directora.

Daniil Ken, jefe del sindicato de educadores y ligado a Navalni, aseguró que ha crecido la presión sobre los educadores. Indicó que una forma de evadir las leyes que protegen a los educadores es despedirlos por conducta inmoral.

Shchegoleva, la profesora de biología que ahora trabaja en una ONG, dice que el clima actual ha causado una sensación de estancamiento en la sociedad.

“Existe la impresión de que no es posible desarrollarse, avanzar, ser más moderno, más leal, más comprensivo y tolerante”, lamentó.