El gobierno espera además una inversión privada de US$ 600 millones para desarrollar un proyecto de generación térmica a base de gas natural, que podrá ser producido en el país o importado por la empresa concesionaria. La central tendrá una potencia de 400 megavatios. (Foto: EFE)
El gobierno espera además una inversión privada de US$ 600 millones para desarrollar un proyecto de generación térmica a base de gas natural, que podrá ser producido en el país o importado por la empresa concesionaria. La central tendrá una potencia de 400 megavatios. (Foto: EFE)

El Gobierno de anunció que buscará concesionar al sector privado la construcción y operación de proyectos de generación de y un sistema de transmisión para la industria petrolera, lo que demandará una inversión conjunta de US$ 1,861 millones.

El presidente quiere aumentar la presencia del sector privado en áreas estratégicas para reactivar la economía de la nación andina, cuyos problemas de liquidez se exacerbaron con la pandemia.

“Creemos que la única manera de avanzar es en conjunto, por ello facilitamos el camino y ratificamos la apertura a inversiones responsables”, dijo el ministro de Energía y Recursos Naturales No Renovables, Juan Carlos Bermeo, durante la presentación de los proyectos.

Las autoridades prevén realizar la convocatoria oficial del concurso público en un plazo de dos meses. La concesión tendrá una duración de hasta 30 años.

En la oferta se incluye un bloque de pequeños proyectos de energías no convencionales como fotovoltaicos, eólicos, hidroeléctricos y de biomasa, que en conjunto alcanzarán los 500 megavatios de potencia y estarán ubicados en diferentes puntos geográficos de la nación sudamericana.

El sector privado podrá ofertar para cada una de estas pequeñas centrales, que demandará una inversión privada total de US$ 875 millones, según datos del ministerio.

El gobierno espera además una inversión privada de US$ 600 millones para desarrollar un proyecto de generación térmica a base de gas natural, que podrá ser producido en el país o importado por la empresa concesionaria. La central tendrá una potencia de 400 megavatios.

Dentro del plan oficial también está la construcción de una nueva línea de transmisión de 290 kilómetros para conectar el sector petrolero al sistema nacional eléctrico, en un intento por reducir el consumo de combustibles fósiles en esta actividad. La inversión privada proyectada es de US$ 386 millones y el objetivo es entregar 300 megavatios.

Los proyectos entrarían en operación entre el 2024 y 2026, de acuerdo al cronograma del gobierno.

Ecuador realizará cambios en la regulación eléctrica para garantizar la participación de la inversión privada nacional e internacional en el estratégico sector, concluyó Bermeo.