Al reanudarse las vacunas con la inyección de J&J, se podrán prevenir hasta 1,400 muertes por COVID-19 y hasta 3,500 ingresos a unidades de cuidados intensivos durante seis meses. (REUTERS/Dado Ruvic).
Al reanudarse las vacunas con la inyección de J&J, se podrán prevenir hasta 1,400 muertes por COVID-19 y hasta 3,500 ingresos a unidades de cuidados intensivos durante seis meses. (REUTERS/Dado Ruvic).

Las autoridades sanitarias estadounidenses dieron luz verde a la reanudación de la inmunización contra el COVID-19 con la vacuna de en Estados Unidos, que se suspendió el 13 de abril tras unos raros casos de trombosis.

“El uso de la vacuna contra el COVID-19 de Janssen debe reanudarse en Estados Unidos”, señalaron en un comunicado conjunto los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) y la agencia estadounidense del medicamento, la FDA, al considerar que los beneficios de la vacuna superan los riesgos.

Más temprano, asesores de los reguladores de salud de ese país dijeron que el uso de la vacuna de J&J para el COVID-19 debería reanudarse. Ello tras revisar datos que muestran que ayudará a salvar vidas y evitar hospitalizaciones pese al riesgo de coágulos sanguíneos muy raros pero potencialmente mortales.

La recomendación allanó el camino para que la vacuna de J&J comience a ser usada nuevamente en Estados Unidos. Los CDC y la FDA habían detenido su uso la semana pasada para revisar los informes sobre coágulos.

Al reanudarse las vacunas con la inyección de J&J, se podrán prevenir hasta 1,400 muertes por COVID-19 y hasta 3,500 ingresos a unidades de cuidados intensivos durante seis meses, dependiendo de cuántas dosis se usen, dijo al panel la funcionaria de los CDC Sara Oliver.

También podría haber al menos 26 casos de la condición de coágulos durante ese período de los casi 10 millones de inyecciones administradas, afirmó.