“No quiero especular, cada caso debe ser tratado por separado”, respondió el portavoz de la cancillería, Steffen Hebestreit, cuando fue consultado por sus similitudes con el caso de Cosco. (AFP).
“No quiero especular, cada caso debe ser tratado por separado”, respondió el portavoz de la cancillería, Steffen Hebestreit, cuando fue consultado por sus similitudes con el caso de Cosco. (AFP).

El Gobierno alemán aseguró estar estudiando la posibilidad de permitir la compra de una fábrica de chips alemana por parte de una empresa china; ello, luego de que el gigante Cosco adquiera parte de una terminal del puerto de Hamburgo.

La información fue brindada, en una rueda de prensa, por el portavoz de la cancillería, Steffen Hebestreit, quien señaló que el procedimiento para determinar si la operación supone un riesgo para la seguridad nacional todavía no ha finalizado.

“No quiero especular, cada caso debe ser tratado por separado”, respondió cuando fue consultado por sus similitudes con el caso de Cosco.

De otro lado, una fuente del Ministerio de Economía indicó que la fábrica aludida es la Dortmund Semiconductors, situada en la ciudad homónima del oeste de Alemania y propiedad de la empresa Elmos.

La compañía interesada en su adquisición es la sueca Silex Microsystems, una filial de la corporación china Sai Microelectronics.

Mientras, el diario económico “Handelsblatt” informó que fuentes de los servicios secretos alemanes se han pronunciado en contra de la operación y han alertado de la creciente dependencia de Pekín en el mercado de los semiconductores. Sin embargo, según este medio, el canciller Olaf Scholz es partidario de dar luz verde al trato entre Elmos y Silex Microsystems.

La venta de una parte de una terminal del puerto de Hamburgo a la empresa estatal china Cosco ha causado considerable polémica en el seno del gabinete y de la coalición de socialdemócratas, verdes y liberales.

Finalmente, a instancias de Scholz, el Consejo de Ministros llegó al compromiso de permitir esa operación restringiendo el porcentaje de participaciones que puede adquirir Cosco a un cuarto del total e impidiendo que obtenga voz en cuestiones estratégicas.

Para el caso de la fábrica de chips existe unanimidad entre el canciller y el Ministerio de Economía, de acuerdo con “Handelsblatt”, ya que la tecnología empleada por Elmos no es puntera y no existe el riesgo del robo de conocimiento.

Con información de EFE.