Sarah Gilbert recibió el sábado por la noche la noticia de que la vacuna contra el COVID-19 que desarrolló con AstraZeneca Plc parecía funcionar. Pero la profesora de la Universidad de Oxford esperaba un número clave: ¿fue efectiva en más del 90%, como otras, o menos?
En cambio, cuando su colega Andrew Pollard la llamó con los resultados quería mostrarle su presentación en lugar de simplemente entregarle las cifras. “Realmente no entendía por qué tendríamos que ver las diapositivas”, recordó. “Pero luego quedó claro, la razón era que los resultados eran bastante más complicados en nuestro ensayo”.
Esa complejidad generó incertidumbre en torno a una de las favoritas, junto con la Pfizer Inc. y BioNTech SE y la de Moderna Inc., en la carrera por una oportunidad para poner fin a la pandemia.
Dudas sobre la dosis más efectiva de la vacuna, su historial de seguridad y el enfoque de los socios para probarla han arrojado dudas sobre si la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA por sus siglas en inglés) la aprobará.
La madrugada del lunes, AstraZeneca y Oxford informaron resultados después de que 131 participantes del ensayo en el Reino Unido y Brasil contrajeran COVID-19. La eficacia promedio de prevención del 70% sonó bien, dentro de las expectativas de los analistas y por encima del 50% que la FDA había establecido para las vacunas contra el COVID.
El estudio también encontró 16 casos graves, todos ellos entre personas que no recibieron la vacuna de AstraZeneca, según Moncef Slaoui, exinvestigador de GlaxoSmithKline Plc que dirige el programa Operation Warp Speed de Estados Unidos.
Fue una buena noticia para el programa de vacunas de Astra que se había detenido durante seis semanas en Estados Unidos, mientras que los reguladores revisaron un evento adverso grave del que la compañía nunca dio detalles. Oxford informará detalles de esos eventos adversos en su estudio de eficacia que presentará para su revisión en las próximas semanas.
Las acciones de AstraZeneca subieron hasta un 2.4% el martes temprano en Londres después de caer un 3.8% el lunes.
La parte desconcertante sobre los resultados de Astra fue que las dosis más grandes fueron menos eficaces. La vacuna tuvo solo un 62% de efectividad en un grupo que recibió dos dosis completas con un mes de diferencia. Pero entre aproximadamente 2,700 personas que recibieron primero media dosis seguida de una completa, el número de efectividad aumentó al 90%.
Datos positivos de otra vacuna de eficacia sustancial con ventajas potenciales en el almacenamiento, el transporte y la asequibilidad serán bienvenidos, dijo Jesse Goodman, exjefe de la oficina de vacunas de la FDA que luego fue el científico jefe de la agencia.
“Lo que aún no está claro es si este efecto es una observación fortuita o refleja algo respecto de que la dosis más alta puede afectar negativamente la respuesta inmune”, dijo en una entrevista. “Necesitamos más detalles para comenzar a entenderlo”.
Geoffrey Porges, analista de SVB Leerink, fue una de las voces más críticas y calificó los datos como “prematuros e insuficientes” en una nota a los clientes y predijo que la vacuna “nunca sería autorizada en EE.UU.”
Ser paciente
AstraZeneca y Oxford están realizando pruebas de la vacuna en diferentes partes del mundo, y actualmente solo están estudiando dos dosis completas de la vacuna en su ensayo en Estados Unidos, que se espera que incluya a 30.000 voluntarios.
Pero la compañía aún está reclutando participantes y podría agregar otro grupo para realizar más estudios del régimen utilizando la mitad de la dosis, dijo Ruud Dobber, vicepresidente ejecutivo de AstraZeneca y presidente del área biofarmacéutica.
“Seamos un poco más pacientes y veamos cómo reaccionará la FDA antes de hacer declaraciones tan duras”, dijo en una entrevista con Bloomberg TV.
La Agencia Reguladora de Medicamentos y Productos Sanitarios del Reino Unido ya comenzó su análisis en función de los datos recibidos en una revisión en curso, dijo la directora ejecutiva, June Raine, en un comunicado.
Los países de ingresos bajos y medios están considerando la vacuna, cuyo precio es mucho más bajo que el de Pfizer y Moderna, como una salida de la pandemia. El menor porcentaje de eficacia del régimen de dos dosis completas alcanzó el umbral requerido por la Organización Mundial de la Salud, según el científico jefe Soumya Swaminathan.
Aun así, Swaminathan advirtió en una entrevista el martes con Bloomberg Television que se necesitan datos más completos para comprender las posibles discrepancias entre las dosis. “Realmente necesitamos esperar números más grandes, un seguimiento más largo, para ver si estas diferencias realmente continúan en el futuro”, dijo.
El hecho que una dosis más baja produzca un mejor resultado dejó a Gilbert rascándose la cabeza. Los investigadores probaron un régimen de una inoculación inicial de media dosis para demostrar que una menor cantidad también podría generar una respuesta inmune fuerte, dijo Gilbert, no para aumentar la efectividad.
“Me sorprendió”, dijo en una entrevista. “Realmente no esperaba eso”.
Su superioridad sobre la inoculación de dos dosis completas podría ser una buena noticia, ya que permitiría a la compañía realizar más inoculaciones con el mismo volumen general de vacuna. Eso podría ser importante debido a la necesidad de vacunar a miles de millones de personas en todo el mundo.
La vacuna utiliza un adenovirus de chimpancés inofensivo como vector, el que luego se inserta con la proteína espiga del coronavirus para generar una respuesta inmune.
Razones teóricas
Es teóricamente posible que una dosis inicial completa genere anticuerpos contra el propio vector de adenovirus, lo que podría haber limitado la respuesta inmune a la proteína del coronavirus, dijo Gilbert. Pero su equipo midió los anticuerpos contra el adenovirus en estudios anteriores y encontró solo un pequeño efecto.
“No estoy realmente segura de si esa es la respuesta completa. Lo investigaremos un poco más”, dijo. “Pero puede ser algo más sutil en términos de inducir una respuesta inmune de alta calidad al administrar la cantidad justa de antígeno de la vacuna en la primera dosis y luego expandirla con la segunda dosis”.
Una posible explicación para los diferentes resultados es que la dosis inicial más baja hace un mejor trabajo al atravesar las defensas del cuerpo, permitiendo que la vacuna infecte las células y cree la respuesta inmune, dijo Michael Kinch, experto en desarrollo de medicamentos y vicecanciller asociado de la Universidad de Washington en St. Louis.
Otra razón teórica es más compleja: el sistema inmunitario puede quedar infectado por la dosis alta inicial de la vacuna y luego ignorar la dosis posterior, un fenómeno conocido como tolerancia o desensibilización inmune. Cualquiera sea el caso, tiene el potencial de mitigar los efectos de la vacuna.
“A la larga, el número principal del 90% podría resultar ser el correcto”, dijo Kinch, “pero la inversión de la respuesta ante la dosis podría ser un signo de preocupación”.
El equipo de Oxford aún está analizando sus datos para comprender mejor cómo funciona la vacuna. Gilbert dijo que confía en que el mayor número de eficacia se mantendrá dentro del rango cuando tengan más datos.
“Podría subir o bajar un poco”, dijo. “No creo que vaya a cambiar sustancialmente, pero puede diferir de ese 90% inicial en cualquier dirección cuando lleguemos a un análisis un poco más amplio”.