Universal Music Group
Universal Music Group

La entre Estados Unidos y China puede dar a Vivendi algo de protección útil si la venta de su participación en Universal Music Group no genera su precio objetivo.

En julio, el conglomerado de medios francés anunció su plan de vender hasta el 50% del mayor sello discográfico del mundo, pero a marzo de este año aún no se había elegido un banco para hacerse cargo de la venta, informó el jueves Bloomberg News.

Inversionistas en capital privado, cansados de la lentitud y la valuación de 25,000 millones de euros (US$ 28,000 millones) del vendedor, han abandonado el proceso y dejado a Vivendi en busca de compradores estratégicos.

es un nombre que surge reiteradamente como posible socio. Es difícil determinar el alcance del interés del gigante tecnológico chino. Ha habido conversaciones entre ambas firmas, de acuerdo con la noticia del jueves.

No obstante, ¿tendría más sentido un acuerdo para Tencent que para, digamos, o Google de Alphabet? Difícil ver cómo. Todas esas compañías ya cuentan con acuerdos de licenciamiento vigentes con UMG, al igual que Tencent, así que la necesidad de ser propietaria de su propio contenido musical parece escasa.

Asimismo, adquirir una participación en UMG les complicaría hacer negocios con los otros grandes sellos discográficos: Sony Music y Warner Music. La lista de compradores estratégicos se acorta.

Tencent, propietaria de WeChat, puede costear fácilmente un acuerdo. Su flujo libre de caja anual supera los US$ 13,000 millones y su deuda neta no llega al 10% del Ebitda anual, pero la idea de que esté dispuesta a pagar generosamente por una asociación más bien parecen ser castillos en el aire de parte de Vincent Bollore, el multimillonario que controla Vivendi.

Es poco probable que el gigante chino haga un cheque por la mayor suma de su historia para una adquisición sin obtener el control a cambio. Es posible que la compañía se alíe con capital privado, como lo hizo cuando adquirió el control de la empresa desarrolladora de videojuegos para móviles Supercell por US$ 8,600 millones en el 2016, pero parece reacia a pagar de más.

Es importante recalcar que para Tencent la música es un negocio secundario y la música occidental es un negocio secundario dentro de eso. La compañía con sede en Shenzhen gana dinero con juegos y anuncios.

En marzo escindió y sacó a bolsa a Tencent Music Entertainment Group, una división que genera el 70% de sus ingresos con streaming en vivo y karaoke online, y si bien los consumidores chinos no son renuentes a escuchar a Selena Gomez o Elton John, las canciones populares de Occidente no son su primera elección para el karaoke o el streaming.

Así que mientras la compra de Supercell, creador de Clash of Clans, encajó perfectamente en el catálogo de juegos de Tencent, no hay mucho beneficio derivado de poseer los derechos de artistas como Carrie Underwood o Herbert Groenemeyer.

Es por eso la tensión comercial podría brindar la excusa perfecta que Vivendi necesita. A ciertos involucrados en la oferta les preocupa que una venta a los chinos pueda enojar a funcionarios estadounidenses, según Bloomberg News.

Aquello parece exagerado porque la música difícilmente es un tema de seguridad nacional, pero si Tencent no hace una propuesta que le guste a Vivendi, entonces apuntar al conflicto le da a la empresa francesa una puerta de salida.

Por Alex Webb & Tim Culpan

Esta columna no necesariamente refleja la opinión de la junta editorial o de Bloomberg LP y sus dueños.

TAGS RELACIONADOS