Alain Berset
Alain Berset

"En , la presidencia es una función que se comparte con otros. Se asume por un año y luego se transfiere a otro miembro del Gobierno. La sensación de continuidad es muy fuerte", explica el flamante presidente suizo Alain Berset.

En , este socialista friburgués de 45 años manifiesta que en este entorno de democracia directa "ciertamente hay matices, una forma diferente de decir las cosas, pero uno no se convierte en presidente de la Confederación diciéndose que tiene un año para hacer aceptar sus ideas".

"Cuando uno se compromete, es para el conjunto de la sociedad, en interés de todo el país, no para causas particulares", anotó Berset, quien es también ministro del Interior y el más joven presidente de la Confederación desde 1934.

La democracia directa no es una democracia de sondeo


Al ser consultado si las herramientas de la democracia directa, base del sistema político suizo, podrían ser un freno en un mundo que evoluciona muy rápidamente, el presidente Berset respondió:

"La engendra, efectivamente, desafíos muy importantes en relación con la velocidad con la que se desarrollan las cosas. A veces nos movemos más despacio que en otros países. Pero el hecho de que el mundo cambie rápidamente no significa que tengamos que cuestionar la democracia tal como la conocemos. Durante los últimos 20 a 30 años, hemos tenido bastante éxito en adaptarnos".

El político dijo que la particularidad del sistema político suizo plantea, sin embargo, ciertas exigencias.

"En primer lugar, un panorama mediático diversificado y de calidad, para que los ciudadanos puedan informarse y forjarse una opinión clara en vista de las votaciones. Pero también una responsabilidad de los partidos políticos en el uso que hacen de los instrumentos de la democracia directa", resaltó.

Además de las relaciones bilaterales con la Unión Europea, otro de los mayores desafíos del nuevo presidente es buscar soluciones para sanear el sistema de pensiones de vejez, después de que los suizos rechazaran en setiembre del 2017 la reforma que el mismo Berset (entonces titular de Salud) condujo durante seis años.

Ante este hecho y frente al surgimiento de una democracia de protesta, como lo que sucedió con la elección de en Estados Unidos o el en el Reino Unido, Berset dijo que "hoy en día, a veces olvidamos que la democracia directa no es una democracia de sondeo, sino una democracia de decisión".

"No podemos simplemente enviar una señal o pensar que se responde a una encuesta al deslizar una boleta dentro de las urnas. Votar es un acto serio", subrayó.

El presidente suizo recordó que "en el pasado reciente ha sucedido que los ciudadanos lamenten su voto después de aceptar ciertas iniciativas populares, reconociendo que no habían considerado todas las consecuencias de su decisión".

"El voto de protesta puede ser legítimo cuando se opone a una decisión política. En cambio, si el voto de protesta afecta las instituciones o la forma en que opera el país, eso plantea un problema", concluyó.

Presidencia rotativa y anual

A inicios de diciembre pasado, el Parlamento suizo elegió a Alain Berset presidente de la Confederación durante el año 2018. En Suiza, la presidencia es rotativa y anual. Cada año la asume uno los siete ministros que integran el gobierno colegiado, más conocido como Consejo Federal.

Alain Berset, licenciado en Ciencias Políticas y Economía, asume por primera vez la presidencia de Suiza desde que fue nombrado ministro hace cinco años.

Miembro del Partido Socialista, Berset fue elegido con 190 votos en el Parlamento y relevó a Doris Leuthard en la presidencia el 1 de enero del 2018. El nuevo vicepresidente es Ueli Maurer, miembro de la Unión Democrática de Centro (UDC, derecha conservadora).