Un camión pasa junto a los barcos atracados en el puerto de Los Ángeles, en Los Ángeles, California, el 14 de octubre de 2021.  (Foto: AFP)
Un camión pasa junto a los barcos atracados en el puerto de Los Ángeles, en Los Ángeles, California, el 14 de octubre de 2021. (Foto: AFP)

Gran sorpresa generó la congestión de buques -que transportan contenedores- que se observó frente a los puertos principales en California (Estados Unidos). “Es un aumento de carga sin precedentes”, adelantó sorprendido el alcalde de Long Beach.

El fuerte incremento de las compras en línea durante la pandemia del coronavirus y la falta de transportistas y camiones han provocado el caos en las terminales de los puertos de EE.UU.

Además, la cercanía de las fechas navideñas ha puesto los problemas de la cadena de suministro de Estados Unidos en el punto de mira de millones de personas, que no se explican cómo una potencia de tal calibre tiene paralizadas sus vías de entrada de productos, mayoritariamente procedentes de Asia.

El puerto de Los Ángeles, la mayor terminal de contenedores de Norteamérica, comenzó a trabajar las 24 horas del día luego de que la Casa Blanca intervino para subsanar cuellos de botella que complican el comercio y aumentan los precios.

Aún así, una docena de buques con miles de contenedores siguen anclados en la bahía esperando un espacio en los colmados muelles. Algunos esperan más de 10 días.

“Esto no es como apagar y encender un interruptor de luz: hay que resolver problemas individuales para que la operación 24/7 tenga fluidez”, señaló en una rueda de prensa el director ejecutivo del puerto de Los Ángeles, Gene Seroka, que optó por no dar una fecha estimada del inicio de este nuevo horario.

El Fondo Monetario Internacional (FMI) advirtió que las alteraciones en las cadenas de abastecimiento están encareciendo los productos. En Estados Unidos los precios al consumidor subieron más de 5% en 12 meses a setiembre.

Existen muchos factores detrás de la falta de materias primas y bienes terminados que afecta a los comerciantes minoristas.

También influyen los cierres forzados de fábricas debido a las restricciones por el coronavirus, un inesperado aumento de la demanda de algunos bienes, cambios en la conducta de los consumidores y falta de trabajo.

Cada año un cuarto de billón de dólares en bienes pasa por el puerto de Los Ángeles.

“Lo que ocurre en Los Ángeles y otros puertos de la costa oeste reverbera en todo el país”, explicó Peter Friedmann, director ejecutivo de Agriculture Transportation Coalition.

El Banco Mundial estima que el 8.5% de los contenedores del mundo está detenido en esos puertos, o en sus cercanías.

Con información de AFP y EFE