(Foto: AFP)
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Laadmitió un recurso de la poderosa y su decisión podría influir en la capacidad de las autoridades para regular el porte de armas de fuego fuera del hogar.

La máxima corte, que cuenta con seis magistrados conservadores entre sus nueve miembros, analizará en el otoño boreal una ley de Nueva York contestada por la rama local de la NRA y dos dueños de armas.

Por esa centenaria ley, el estado de Nueva York permite a esas dos personas portar armas en clubes de tiro o para cazar, pero no con fines de autodefensa. Tras haber perdido en tribunales federales, recurrieron a la Corte Suprema.

La corporación dio lugar al recurso, pero dijo que solo se pronunciaría sobre una pregunta: “La negativa del Estado de permitir a los demandantes portar armas ocultas con fines de autodefensa ¿es una violación de la Segunda Enmienda” de la Constitución?

Esa enmienda, que ha sido objeto de distintas interpretaciones, establece: “Una milicia bien organizada es necesaria para la seguridad de un estado libre, no se violará el derecho del pueblo a poseer y portar armas”.

Para los partidarios de las armas, se garantiza el derecho de los ciudadanos a portarlas. Otros consideran que los autores de la Constitución solo quisieron proteger el derecho de poseer y utilizar armas en el marco de una fuerza de mantenimiento del orden; como el ejército o la policía.

En una emblemática sentencia del 2008, la Suprema Corte dictaminó que esa enmienda protege el derecho a tener armas en el hogar. Sin embargo, la norma dejó a las ciudades y estados reglamentar el transporte de armas fuera de la casa; lo cual explica grandes disparidades en el país.

A pesar de muchas solicitudes, la Suprema Corte se mantuvo desde entonces al margen del tema.

Sin embargo, durante el mandato del presidente Donald Trump fueron nombrados tres magistrados de opiniones conservadoras y proclives a apoyar a los defensores de las armas.

“Confianza”

La noticia dio esperanzas a la NRA: “Tenemos confianza: la Corte le dirá a Nueva York y otros estados que la Segunda Enmienda sobre el derecho a defenderse es fundamental y no desaparece cuando salimos de nuestras casas”, dijo el grupo de lobby en un comunicado.

Del otro lado, los partidarios de una mayor regulación de las armas temen que la Corte adopte una lectura amplia de la Segunda Enmienda y derribe las restricciones adoptadas localmente.

“La voluntad de la Corte de tomar este recurso podría llevarnos en la dirección equivocada, al restringir las normas del buen sentido”, escribió Hannah Shearer, de la organización Giffords, dedicada a “salvar vidas de la violencia armada”.

Shearer pidió que la Corte no “dé la razón al lobby armamentista, que quiere eliminar hasta las leyes más modestas”.

La sentencia de la Corte podría también contrariar los proyectos del presidente Joe Biden de endurecer la legislación contra las armas luego de una serie de ataques mortales.

Más de 43,000 personas, incluyendo suicidas, murieron por armas de fuego en el 2020 en el país, según el sitio Gun Violence Archive.