Oficina del Banco Popular en España. (Foto: Expansión)
Oficina del Banco Popular en España. (Foto: Expansión)

Un tribunal de apelaciones de reafirmó este lunes la decisión de un juez de Nueva York que el año pasado rechazó que el tuviera que entregar documentación sobre la compra del Banco Popular a un grupo de sus bonistas, que perdieron su inversión.

Se trata de una victoria judicial del Santander frente al fondo de inversión estadounidense Pimco, la firma inversora Anchorage y un grupo de inversores mexicanos liderado por Antonio del Valle, el que fuera principal accionista del Popular, y que cuestionan la legalidad de la adquisición.

Los afectados interpusieron contra el Santander y sus subsidiarias estadounidenses en un tribunal del Distrito Sur de Nueva York la figura del “discovery”, por la que los demandantes pueden exigir a un ente que entregue documentación a otro sobre un caso judicial abierto en el extranjero.

El juez estadounidense Edgardo Ramos emitió un fallo en el 2018 rechazando que Santander tuviera que entregar documentación en Estados Unidos a esos bonistas y ordenó que solo lo hiciera la filial Santander Investment Securities, que tiene sede en Nueva York pero no participó en el proceso de resolución de compra del Popular.

Esa decisión fue apelada pos las firmas y los inversores, y según el documento publicado por la corte de apelaciones del Segundo Circuito, al que tuvo acceso Efe, este lunes un panel formado por tres magistrados reafirmó el fallo de Ramos, lo que prácticamente agota la vía para recurrir esa opinión en Estados Unidos.

Precisamente este lunes, la presidenta del banco Santander, Ana Botín, participó en un acto en el Economic Club of New York donde repasó la evolución de la entidad desde sus inicios y recordó la compra del Banco Popular por un euro en el 2017.

“Hace dos años, Santander se convirtió en el primer banco que compró un banco por resolución”, después de que fuera intervenido por las autoridades y posteriormente lo comprara por un euro, señaló Botín.