Las compañías de comida rápida estadounidenses dirigen cada vez más publicidad de comida "no saludable" hacia los jóvenes y niños de minorías como los latinos y los afroamericanos, de acuerdo con un reporte.

"Hemos visto que muchos de los anuncios de productos que no son saludables que se están transmitiendo por televisión están dirigidos exclusivamente hacia los consumidores hispanos y en especial a los más jóvenes", dijo e Rosalie Aguilar, coordinadora de proyectos de Salud América, una de las organizaciones que participó en el estudio.

La investigación encontró que las empresas de comida rápida aumentaron en un 86% su inversión en anuncios colocados en espacios de programación dirigidos a menores afroamericanos y un 82% hacia canales de televisión o programación en español en el 2017.

"Los menores hispanos están viendo cada vez más anuncios de alimentos que no son saludables, en español y en inglés, como dulces, bebidas azucaradas y comida 'chatarra'", indicó la experta.

De acuerdo con el reporte, US$ 8 de cada US$ 10 que se invierten en anuncios de televisión de comida rápida, dulces, bebidas azucaradas y meriendas poco saludables se dirigen a estos grupos.

En total, la industria alimenticia invirtió US$ 1,100 millones en publicidad en el 2017, asegura el reporte.

Aguilar señaló que, pese a que muchas de las compañías analizadas han desarrollado productos y opciones saludables para responder a las demandas del mercado, no están dirigiendo estos esfuerzos hacia grupos minoritarios como los hispanos y los afroamericanos.

"Estas compañías están aumentando su inversión en publicidad dirigida a menores latinos de sus productos menos saludables, y por el contrario están invirtiendo cero dólares en sus opciones más saludables como yogur, frutas o nueces. Estas compañías están al tanto de las consecuencias que tienen estas opciones en la comunidad latina y, aun así, son las que promueven", aseveró.

De acuerdo con la investigación, el 20% de los anuncios dirigidos a los niños hispanos eran de dulces, mientras que aquellos que publicitaban productos con nueces o frutas representaban no más de 3%.

La investigación destaca la necesidad de revertir esta tendencia para poder reducir el consumo de alimentos altos en azúcares, sal y grasas saturadas, que son en gran medida responsables por las altas tasas de obesidad infantil que afectan a los menores en Estados Unidos.

Las tasas de obesidad infantil entre los menores hispanos y afroamericanos son dos veces más altas que entre los menores blancos.

De acuerdo con cifras oficiales, el 26% de los menores hispanos es obesos, mientras que la cifra es de 22% entre los afroamericanos, comparado con un 14% entre los blancos.

"Parte de lo que recomendamos en el estudio, es que se eleve la edad a la que se puede dirigir publicidad de productos no saludables a menores, que por ahora existe el compromiso de no hacerlo con menores de 12 años o menos, y estamos pidiendo que se cambie a 14 años", dijo Aguilar.