Estados Unidos levanta veto a navegación de cruceros. (Foto: AFP)
Estados Unidos levanta veto a navegación de cruceros. (Foto: AFP)

Las autoridades sanitarias delevantaron la prohibición a la navegación de cruceros en puertos del país después de casi ocho meses de parálisis debido al COVID-19, pero la apertura será condicionada y escalonada.

El veto vence mañana sábado 31 de octubre y técnicamente la navegación podría comenzar a partir del domingo 1 de noviembre, informaron los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, en inglés).

Sin embargo, esta agencia federal, que paralizó la actividad naviera desde el pasado 13 de marzo, subrayó que será “por fases” para asegurar un retorno seguro, según el denominado “Marco para la navegación condicional” que publicó este viernes.

El documento detalla que la primera fase requiere pruebas y salvaguardas para los miembros de la tripulación, seguidas de “viajes simulados” para asegurarse de que las empresas de cruceros puedan mitigar el riesgo del COVID-19.

Después de eso, la autoridad sanitaria de Estados Unidos, país que afronta un incremento del contagio, que sobrepasó hoy los 9 millones de casos y más de 228,000 muertes, permitirá un “regreso gradual” a los viajes de cruceros con pasajeros.

Se trata de “un camino para reanudar la navegación segura y responsable”, subraya el documento.

“Mitigará el riesgo de brotes del COVID-19 en los barcos y evitará que los pasajeros y la tripulación lleven brotes a los puertos y sus comunidades”, señaló Robert Redfield, director de los CDC.

Agregó que esta agencia y la industria de cruceros tienen “un objetivo común para proteger a la tripulación, los pasajeros y las comunidades”.

La economía de Florida, cuyo principal motor es la industria turística, se ha visto gravemente afectada por la pandemia, en buena medida por la parálisis de los cruceros y también por restricciones de vuelos procedentes de ciertos países de Europa y Latinoamérica.

Solo en los primeros seis meses de la crisis sanitaria se calculan daños colaterales para Florida por US$ 22,000 millones y la pérdida de 169,000 puestos de trabajo en los primeros seis meses debido a la paralización de cruceros, según un análisis de la Comisión Marítima Federal (FMC).

Todas las líneas de cruceros habían suspendido sus operaciones en Estados Unidos hasta al menos el 1 de diciembre, es el caso de Carnival, Norwegian y Royal Caribbean, mientras que la Asociación de la Industria de Líneas de Cruceros (CLIA) había impuesto una prohibición voluntaria de los cruceros hasta mañana sábado.