Foto referencial. La ‘fiebre por Miami’, que es muy impulsada por el alcalde Francis Suarez, ya empieza tener frutos: Carl Icahn, uno de los inversores más exitosos de Wall Street según la revista Forbes y  Antonio Gracias, presidente del comité de inversiones de Tesla, ya se instalaron en Miami. (RHONA WISE / AFP)
Foto referencial. La ‘fiebre por Miami’, que es muy impulsada por el alcalde Francis Suarez, ya empieza tener frutos: Carl Icahn, uno de los inversores más exitosos de Wall Street según la revista Forbes y Antonio Gracias, presidente del comité de inversiones de Tesla, ya se instalaron en Miami. (RHONA WISE / AFP)

Miami, la gran ciudad del sur de Florida, está que atrae cada vez más gente de diferentes lugares de Estados Unidos y el mundo, convirtiéndose en un nuevo centro para emprendimiento tecnológico.

“Nunca habíamos visto nada como esto antes”, le dijo aRebecca Danta, de la firma Miami Angels, que conecta socios capitalistas interesados en invertir con emprendedores del sector tecnológico y que buscan financiación para sus proyectos.

Según informa el medio inglés, esto se debe a que Miami se ha beneficiado de la descentralización que causó la pandemia del COVID-19, pues muchos emprendedores tecnológicos que trabajaban en la modalidad de teletrabajo se mudaron allí buscando “menos restricciones, un clima más benigno, más libertad y menos impuestos”.

“El fenómeno se refleja en el mercado de la vivienda, con un aumento interanual del 39,8% en las ventas en los primeros 4 meses de 2021, según los datos de la asociación de agentes inmobiliarios de la ciudad”, explica la BBC.

La ‘fiebre por Miami’, que es muy impulsada por el alcalde Francis Suarez, ya empieza tener frutos: Carl Icahn, uno de los inversores más exitosos de Wall Street según la revista Forbes, y Antonio Gracias, presidente del comité de inversiones de Tesla, ya se instalaron en Miami.

Pero no todos están contentos con este auge inmobiliario.

“La llegada de las empresas tecnológicas es una buena noticia, porque generan empleos, pero en Miami tenemos una crisis histórica de acceso a la vivienda y esto puede poner las cosas todavía peor, haciendo que sea muy difícil para las familias trabajadoras y de clase media tener dónde vivir”, explica Eileen Higgins, comisionada del Distrito 5 del condado de Miami-Dade.

“Muchas de las casas aquí no son casas, sino cuentas bancarias”, comenta en alusión a las viviendas compradas por inversores de América Latina para poner sus ahorros a salvo ante la inestabilidad en dicha región.

De acuerdo a Higgins, en Miami está ocurriendo lo que pasó en California antes del boom tecnológico. “La revolución tecnológica llevó a una crisis de la vivienda”, asegura, al tiempo que propone el uso del suelo público para edificar viviendas protegidas en Miami.

Con información de la BBC Mundo.