Donald Trump
Donald Trump

Washington.- El presidente Donald Trump arremetía el fin de semana con tuits contra los demócratas en medio del estancamiento de las conversaciones para poner fin al cierre parcial del gobierno.

Trump se encontraba encerrado en la Casa Blanca después de cancelar sus vacaciones en su club privado en Florida.

Cuando parecía alargarse al año nuevo la parálisis de los servicios federales y la falta de paga a los empleados públicos, no había señales de negociaciones sustanciales entre las partes, que se culpan una a la otra de la actual situación.

Trump mantiene firme su exigencia de que se asignen miles de millones de dólares de recursos federales a la construcción de un muro en la frontera de Estados Unidos con México, y los demócratas insisten que bloquearán ese propósito.

El mandatario dijo el sábado en un tuit que estaba “en la Casa Blanca esperando a que los demócratas llegaran y concertaran un acuerdo sobre Seguridad Fronteriza”. Sin embargo, ha habido poco contacto directo entre las partes durante el estancamiento, y Trump no pidió a los republicanos, que aún monopolizan el poder en Washington por otros cinco días, que mantuvieran al Congreso en sesión.

Al tiempo que exhortaba a los demócratas a que negociaran sobre el muro, Trump rechazaba las críticas hacia su gobierno de que era responsable de los fallecimientos de dos menores migrantes en custodia de la Patrulla Fronteriza.

El mandatario afirmó que esas muertes eran “estrictamente culpa de los demócratas y sus patéticas políticas de inmigración que permiten a personas hacer una larga travesía en su idea de que pueden ingresar ilegalmente en nuestro país”.

Trump emitió sus tuits cuando la secretaria de Seguridad Nacional se reinía con profesionales médicos y ordenaba cambios de política para mejorar la protección de los menores detenidos en la frontera.

Trump agravó la situación cuando reiteró su amenaza de cerrar la frontera con México para obligar al Congreso a que ceda a su exigencia de destinar recursos a la construcción del muro.

Los demócratas se comprometieron a aprobar una medida para reanudar el funcionamiento total del gobierno cuando asuman el jueves el control de la Cámara de Representantes, pero todo será inútil sin el acompañamiento de Trump y el Senado controlado por los republicanos.

Las conversaciones se han estancado más de una semana después de que los demócratas dijeran que la Casa Blanca dijo que estaría dispuesta a aceptar 2.500 millones de dólares para la seguridad fronteriza.

El líder demócrata del senado Chuck Schumer manifestó al vicepresidente Mike Pence que eso era inaceptable y no garantizaba que Trump, ante la intensa presión de su base conservadora para cumplir su principal promesa de campaña, se conformaría con esa cantidad.