Mike Pompeo. (Foto:AP)
Mike Pompeo. (Foto:AP)

El Departamento de Estado de Estados Unidos se puso a la defensiva después de que legisladores demócratas dijeran que guardaba silencio sobre la xenofobia y el racismo, y luego de que un exdiplomático afirmara que los varones blancos eran la abrumadora mayoría de los reclutas oficiales.

"La afirmación de que el @StateDept es 'racista' es repugnante y falsa, un intento descarado de crear una división para obtener ganancias políticas internas", escribió la portavoz del Departamento, Heather Nauert, en Twitter. "El departamento de Estado es una de las dependencias gubernamentales más diversas".

Los detractores de ese departamento dicen que la llegada del republicano Donald Trump a la Casa Blanca a principios de 2017 fue un punto de inflexión.

"Estamos extremadamente alarmados por la política de la administración Trump de permanecer en silencio en foros internacionales sobre racismo y xenofobia, y de negarse a condenar los discursos de odio e incitación" a la violencia, escribieron seis representantes demócratas en una mordaz carta al secretario de Estado, Mike Pompeo.

Señalaron un episodio en el que un alto funcionario estatal discutió "la idea de que los líderes 'tienen el deber de condenar el discurso de odio o la incitación', y trataron de abordar toda una sección de un documento de Naciones Unidas que vincula la lucha contra el racismo con la construcción de una sociedad democrática diversa".

"Esta es una política peligrosa", escribieron los signatarios, diciendo que "este último error amplifica la percepción cada vez más generalizada de que algunos funcionarios de la administración Trump son racistas y apoyan una agenda discriminatoria anti-extranjera y antimusulmana".

Uzra Zeya, quien trabajó en el Departamento de Estado durante casi tres décadas, antes de renunciar este año después de que fue "bloqueada" de varios puestos principales, arremetió en el sitio especializado Politico: "Trump vuelve a hacer blanca a la diplomacia estadounidense".

En 2017, la exfuncionaria dijo que "la exclusión de las minorías de las principales posiciones de liderazgo en el Departamento de Estado y las embajadas en el extranjero" comenzó a ser una tendencia bajo esta administración republicana.

Por ejemplo, de acuerdo con su análisis de las estadísticas públicas, el 64% de los embajadores designados por el gobierno de Trump eran blancos, no hispanos, siete puntos más que su predecesor, el demócrata Barack Obama.

Además, señaló que entre setiembre de 2016 y junio de 2018, la proporción de afroamericanos en el servicio exterior cayó del 4.6 al 3.2%.