La Cámara de Representantes, controlada por los demócratas, aprobó en mayo un proyecto de ley de US$ 3.4 billones para aliviar el primer golpe del virus. (Foto: AFP)
La Cámara de Representantes, controlada por los demócratas, aprobó en mayo un proyecto de ley de US$ 3.4 billones para aliviar el primer golpe del virus. (Foto: AFP)

Los republicanos y los demócratas del de Estados Unidos pretenden aprobar un cuarto paquete de ayuda para mitigar el impacto del antes de fin de mes, pero tendrán que superar diferencias significativas.

La Cámara de Representantes, controlada por los demócratas, aprobó en mayo un proyecto de ley de US$ 3.4 billones para aliviar el primer golpe del virus.

Los republicanos, que controlan el Senado, podrían conocer un paquete a finales de esta semana que costará más de US$ 1 billón, según dijo el martes el líder republicano del Senado, Mitch McConnell. La Administración del presidente republicano también ha presentado sus propias ideas.

Con las negociaciones a punto de arrancar, estos son los puntos en común y las diferencias en cuanto a lo que cada bando está dispuesto a apoyar.

¿En qué están de acuerdo?

- Pagos directos a los estadounidenses. El Congreso autorizó en marzo pagos directos de hasta US$ 2,400 por familia. El proyecto de ley de la Cámara de Representantes autorizaría otra ronda de pagos de hasta US$ 6,000 por familia. Los republicanos también apoyan otra ronda de pagos directos.

- Ayuda para las escuelas. Ambas partes han respaldado aproximadamente US$ 100,000 millones en apoyo a las escuelas y universidades, muchas de las cuales tuvieron que implementar la educación a distancia esta primavera y están siendo presionadas por Trump para reanudar las clases presenciales este otoño. Una diferencia clave: los republicanos quieren destinar la mitad de ese dinero a las escuelas que intentan impartir clases presenciales, según el senador republicano Roy Blunt.

- Gasto en sanidad. Los republicanos y los demócratas también están a favor de aumentar el dinero para pruebas y otras medidas para contener el virus, así como fondos para los hospitales y los proveedores de asistencia médica que tratan a los enfermos. La Administración Trump inicialmente se opuso a inyectar liquidez para hacer más pruebas, pero ahora también lo apoya.

- Pequeñas empresas. Ambos lados quieren reforzar el plan "Paycheck Protection Program", que proporciona subvenciones y préstamos a las pequeñas empresas que han sido afectadas por el virus.

¿En qué no están de acuerdo?

- Responsabilidad civil. Los republicanos quieren blindar a empresas y otras organizaciones de demandas por daños personales relacionados con el virus. Los demócratas se oponen a estas medidas. Según la Asociación Estadounidense para la Justicia, que representa a los abogados litigantes, los casos de lesiones personales representan 161 de las 3,400 demandas relacionadas con la enfermedad COVID-19 presentadas hasta ahora.

- Un recorte en los impuestos y tasas sobre los salarios. Trump ha presionado para que se reduzca el 7.65% de las tasas sobre las nóminas, que financian a la Seguridad Social y a 'Medicare'. Diputados de ambas partes han mostrado poco interés.

- Otros fondos. Los demócratas incluyeron fondos para el Servicio Postal de Estados Unidos, las elecciones de noviembre, asistencia alimentaria, sistemas de tránsito, préstamos estudiantiles, y una amplia gama de programas diversos. Es poco probable que estas propuestas sean apoyadas por los republicanos, que quieren contener el costo total del proyecto de ley.

¿Qué es lo que está en movimiento?

- Ayuda para los organismos estatales y municipales. Alrededor de 1.5 millones de profesores, bomberos y otros trabajadores del sector público han perdido sus empleos como parte de los esfuerzos de los gobiernos estatales y locales por cerrar las enormes brechas presupuestarias. Los economistas dicen que seguramente habrá más despidos de este tipo si no hay intervención del Congreso.

La Cámara de Representantes autorizó US$ 960,000 millones en ayudas, pero no está claro si los republicanos del Senado estarán de acuerdo. Algunos han dicho que no quieren “rescatar” a los estados de tendencia progresista que gastan más en la Administración, mientras que otros dicen que ese apoyo es necesario ahora que la pandemia se ha extendido a partes más conservadoras del país.

- Ayuda para el desempleo. El Congreso ha aumentado las ayudas al desempleo en US$ 600 al mes, pero esa ayuda expirará a finales de julio. Los economistas dicen que eso podría frenar la recuperación económica y dificultar que millones de estadounidenses desempleados paguen sus facturas.

El proyecto de ley de la Cámara del Congreso prolongaría esos subsidios hasta febrero del 2021. Los republicanos, en cambio, dicen que estos pagos deben recortarse porque, combinados con la prestación normal para el desempleo, proporcionan más dinero a muchas personas de lo que ganarían con su propio puesto de trabajo.