Los republicanos han rechazado el monto de la propuesta de Biden, que se suma a los US$ 4 billones en ayuda por el COVID-19 del año pasado. (SAUL LOEB / AFP).
Los republicanos han rechazado el monto de la propuesta de Biden, que se suma a los US$ 4 billones en ayuda por el COVID-19 del año pasado. (SAUL LOEB / AFP).

La Cámara de Representantes de Estados Unidos, liderada por los demócratas, se preparaba el martes para dar el primer paso hacia la aprobación de un paquete de ayuda de US$ 1.9 billones por el COVID-19 prometido por el presidente Joe Biden, con una votación clave para acelerar la medida en el Congreso.

La medida presupuestaria fiscal para el 2021, con instrucciones de gasto relacionadas con el coronavirus para los comités del Congreso, iba a ser votada en la Cámara y ayudaría a desbloquear una herramienta legislativa necesaria para que los demócratas promulguen el paquete rápidamente frente a la oposición republicana.

Los republicanos han rechazado el monto de la propuesta de Biden, que se suma a los US$ 4 billones en ayuda por el COVID-19 del año pasado. El lunes, el presidente se reunió con 10 senadores republicanos para discutir un plan reducido de US$ 618,000 millones, pero les dijo que no iba lo suficientemente lejos para abordar una pandemia que ha acabado con la vida de 444,000 personas en Estados Unidos.

No retrasará el trabajo en esta respuesta urgente a la crisis y no se conformará con un paquete que no atienda este momento”, dijo después la portavoz de la Casa Blanca, Jen Psaki.

Jared Bernstein, miembro del Consejo de Asesores Económicos de la Casa Blanca, dijo que la propuesta republicana se quedó muy corta en varias áreas, incluida la financiación para reabrir los colegios. Los republicanos pidieron gastar US$ 20,000 millones en escuelas, frente a la propuesta de Biden de US$ 170,000 millones.

Cuando miremos los números, se necesitará una magnitud del tipo de propuesta que estamos presentando”, dijo Bernstein a CNN. “Creemos que eso es lo que se necesita para que llegue a la gente”.

El paquete de Biden enfrenta un posible obstáculo republicano en el Senado de 100 escaños, que está dividido 50-50 pero requiere un umbral de 60 votos para aprobar la mayoría de las leyes.

Si es aprobada por la Cámara y el Senado, la resolución presupuestaria activaría una herramienta legislativa llamada reconciliación, que permitiría la aprobación del Senado con 51 votos de 48 demócratas, dos independientes que se unen a ellos y la vicepresidenta Kamala Harris.