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La Reserva Federal (Fed) usará una amplia serie de medidas de empleo, incluyendo la tasa de participación en la fuerza laboral, para determinar cuándo la economía ha vuelto al “máximo empleo”, parte de un nuevo y agresivo enfoque para recomponer el mercado laboral de Estados Unidos, dijo el vicepresidente de la Fed, Richard Clarida.
En una extensa exposición de la nueva estrategia, Clarida dijo que el banco central de Estados Unidos continuaba vigilando el avance económico del país durante la pandemia del coronavirus, y cómo sus diversos programas -incluyendo la compra de US$ 120,000 millones mensuales en bonos del gobierno- podrían desplegarse mejor.
El actual aumento de casos de coronavirus ha llevado a especular con que la Reserva Federal podría alterar su compra de activos en diciembre para proporcionar más apoyo, pero Clarida, en comentarios preparados para un panel organizado por la Brookings Institution, no dio ninguna indicación directa de ello.
Pero sí explicó con detalle la firmeza con la que la Reserva Federal está comprometida no sólo a que vuelva a haber una baja tasa de desempleo, sino también a asegurar que los trabajadores marginados vuelvan a sus puestos después de la dramática pérdida de empleos de la primavera pasada.
Clarida dijo que “como cuestión práctica”, las autoridades no considerarán que la economía está en pleno empleo sólo porque la tasa de desempleo haya vuelto a un nivel bajo.
Más bien, dijo, una parte adecuada de la población tendrá que estar trabajando, y la tasa de participación de los grupos de población clave, como las personas en sus mejores años de ingresos, tendrá que volver a la tendencia.
Mientras esos indicadores estén deprimidos, y mientras la inflación permanezca controlada, “la política monetaria debería seguir siendo calibrada para eliminar ese déficit de empleo”, dijo Clarida.
Los comentarios son particularmente notables en la situación actual, en la que la tasa de desempleo general está cayendo rápidamente, pero en parte porque millones de trabajadores han dejado de buscar trabajo debido a la pandemia.
Las personas que no buscan trabajo no se cuentan como desempleados, aunque en el entorno actual sí lo están, ya que se ven expulsados de sus puestos de trabajo por la pandemia y se enfrentan a limitaciones como el cuidado de los niños o problemas de salud familiar que impiden su regreso.