Es necesario un estudio completo del potencial cancerígeno de iQos antes de poder comerciárselo como alternativa más segura a los cigarrillos.
Es necesario un estudio completo del potencial cancerígeno de iQos antes de poder comerciárselo como alternativa más segura a los cigarrillos.

Philip Morris International Inc. quiere pasarse a un “futuro libre de humo”, pero los entes reguladores de Estados Unidos consideran necesarios más datos para evaluar todos los posibles riesgos para la salud de los nuevos cigarrillos electrónicos de la empresa.

Aunque iQos, el producto de la empresa, reducía la exposición a algunos químicos dañinos en comparación con el cigarrillo, los usuarios podían sufrir de todos modos ciertas lesiones precancerosas parecidas a las que pueden causar los cigarrillos tradicionales, afirmó la Administración de Alimentos y Medicamentos de EE.UU. (FDA, por sus siglas en inglés) el lunes en un informe.

Es necesario un estudio completo del potencial cancerígeno de iQos antes de poder comerciárselo como alternativa más segura a los cigarrillos, reza el informe. Se anticipa que Philip Morris publique los resultados de un estudio este año, según el informe.

Estas conclusiones llegan en un momento en el que las tabacaleras enfrentan un declive en la venta de cigarrillos en EE.UU. y en plena campaña de la FDA para reducir la cantidad de nicotina en los cigarrillos a niveles no adictivos.

Tres millones de páginas
IQos viene con un calentador electrónico y un bastón para calentar parecido a un cigarrillo corto. Los usuarios insertan ese bastón en el calentador y aspiran del bastón, que fue calentado a casi 315 grados Celsius. Un cigarrillo arde a más de 537 grados Celsius, según Philip Morris.

El informe de la FDA se pregunta si los estudios de la empresa sobre los efectos toxicológicos no cancerígenos del iQos eran adecuados para medir los efectos del uso crónico y manifestó su inquietud sobre cualquier posible beneficio, dado que las pruebas mostraron que los usuarios tendían a usar iQos y cigarrillos en vez de pasarse exclusivamente al primero.

El personal de la FDA hizo sus comentarios antes de la celebración de una reunión entre asesores externos a la agencia el miércoles y el jueves para discutir la solicitud de Philip Morris para denominar el iQos como menos riesgoso que los cigarrillos. La solicitud del gigante del tabaco tenía más de tres millones de páginas, afirmó anteriormente la empresa.

Audiencia
La FDA les pedirá a los expertos externos que recomienden si Philip Morris demostró que cambiar completamente el cigarrillo por el iQos disminuye el riesgo de padecer enfermedades relacionadas al tabaquismo. 

La FDA no tiene que acatar la recomendación del panel de asesores, pero este la ayudará a determinar si denomina el iQos como “producto de tabaco con riesgo modificado”, o sea, que beneficiará la salud general de la población.

Philip Morris dice que la falta de fuego, humo y ceniza elimina en promedio entre 90% y 95% de los químicos dañinos presentes en el cigarrillo. El personal de la FDA determinó que el aerosol liberado por el iQos produce niveles mucho más bajos de agentes cancerígenos que el humo de los cigarrillos, aunque a diversos niveles.

“Esperamos la oportunidad de discutir la evidencia científica” en la audiencia, dijo en un comunicado el portavoz de Philip Morris, Corey Henry.