"Sabemos que los viajes en crucero nunca serán una actividad con un 'riesgo cero' y que el objetivo del enfoque gradual de la CSO es reanudar las operaciones con pasajeros de una manera que minimice el riesgo de los contagios del COVID-19 a bordo y en las comunidades portuarias", dice la carta de los CDC. (Foto: AFP)
"Sabemos que los viajes en crucero nunca serán una actividad con un 'riesgo cero' y que el objetivo del enfoque gradual de la CSO es reanudar las operaciones con pasajeros de una manera que minimice el riesgo de los contagios del COVID-19 a bordo y en las comunidades portuarias", dice la carta de los CDC. (Foto: AFP)

Los Centros de Control y Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos (EE.UU.) comunicaron a las compañías de que posiblemente las autorice a reanudar para mediados de julio los viajes desde los puertos del país, que están suspendidos desde marzo del 2020 a causa del COVID-19.

Según el diario USA Today, que tuvo acceso a la carta, la reanudación va a depender de cómo cumpla cada compañía con el marco fijado en la Ordenanza de Condiciones para la Navegación (CSO), emitida en octubre pasado, a la que se han hecho algunas actualizaciones, según la carta.

“Sabemos que los viajes en nunca serán una actividad con un ‘riesgo cero’ y que el objetivo del enfoque gradual de la CSO es reanudar las operaciones con pasajeros de una manera que minimice el riesgo de los contagios del COVID-19 a bordo y en las comunidades portuarias”, dice la carta de los CDC.

La carta, que está firmada por Aimee Treffiletti, jefa de la Unidad Marítima de respuesta al COVID-19 dentro de los CDC, da seguimiento a las reuniones que desde hace un mes celebran semanalmente representantes del sector de cruceros con el organismo de salud pública de Estados Unidos.

Entre las novedades contenidas en la carta está el que un barco con un 98% de su tripulación y un 95% de sus pasajeros vacunados podrá evitarse el viaje de prueba sin pasajeros que, de acuerdo con la CSO, deben hacer los cruceros antes de ser autorizados a reanudar sus actividades.

La prohibición de viajar desde puertos de Estados Unidos, su principal mercado del sector, ha agudizado la crisis de uno de los sectores más golpeados por la pandemia.

Algunas compañías han optado por trasladar sus barcos a otras zonas del mundo o por usar puertos del Caribe para la salida de sus barcos, para no quedar totalmente paralizadas.

En Florida, donde muchos millones de dólares y miles de puestos de trabajo dependen de la industria de cruceros republicanos y demócratas han instado a los CDC a relajar las medidas que tienen a los puertos de cruceros del estado sin actividad.

Senadores floridanos han presentado proyectos de ley en el Congreso en Washington para obligar a los CDC a ser más permisivos en incluso el gobernador de Florida, Ron DeSantis, ha planteado una demanda ante la justicia contra el Gobierno federal con el fin de que se levante la prohibición de navegar.

A comienzos de abril los Centros de Control y Prevención de Enfermedades (CDC) actualizaron las medidas que rigen por la pandemia para los cruceros desde puertos de Estados Unidos, pero mantuvieron la recomendación a la población de no embarcarse por placer.

Según la Asociación Internacional de Líneas de Cruceros (CLIA), que representa al 95% de las compañías con cruceros oceánicos, entre marzo y setiembre del 2020 esas empresas presentaron pérdidas globales de US$ 77,000 millones, US$ 23,000 millones en salarios y 518,000 puestos de trabajo.

Solo en el condado de Miami-Dade, la actividad de los cruceros produce unos US$ 7,000 millones al año y da empleo, directa e indirectamente, a unas 40,000 personas, además de servir de sostén a otros sectores de la economía.