EE.UU. y China evitaron una guerra pero no resolvieron pleitos comerciales
EE.UU. y China evitaron una guerra pero no resolvieron pleitos comerciales

Washington y Pekín alcanzaron acuerdos que aventaron una pero los problemas entre las dos mayores economías mundiales están lejos de haberse resuelto, estiman expertos.

y anunciaron el sábado haber alcanzado un consenso para reducir el déficit comercial estadounidense como exige el presidente Donald Trump. Para ello prometió aumentar "considerablemente" sus compras de productos estadounidenses y abrir su mercado.

"Es un gran paso", estimó Larry Kudlow, el principal consejero económico de la Casa Blanca a la cadena de CNBC. "En cierta forma, es una suerte de tratado de paz", dijo. "Los detalles se alcanzarán después" indicó.

De su lado una fuente europea que pidió el anonimato dijo que "esta pausa en la es bastante positiva". Desde hace semanas, se temía un enfrentamiento comercial entre y cuyas consecuencias afectarían a la economía mundial.

"Es sorprendente que dos rondas de negociaciones intensas hayan alcanzado al menos una tregua temporal cuando permanecen sin resolverse diferencias fundamentales en comercio y otros problemas económicos", dijo Eswar Prasad, especialista en de la Universidad de Cornell.

"Al menos se llegó a un acuerdo preliminar", observó en tanto Edward Alden, experto en comercio internacional del Council for Foreign Relations.

Corea del Norte

"Lo que se alcanzó es un vago compromiso de de comprar más productos estadounidenses", sintetizó Alden.

Louis Kuijs, economista de Oxford Economics, observó que el pacto no tiene cifras concretas y que resistió la demanda de Washington de reducir en US$ 200,000 millones el déficit de en la balanza bilateral.

Tras imponer aranceles de 25% al acero chino y de 10 al aluminio, Trump amenazó con tarifas sobre otros productos de China por US$ 150,000 millones.

Desde antes de entrar a la Casa Blanca en enero del 2017, Trump prometió castigar lo que considera como prácticas desleales de China que, sostiene, terminan robando empleos a los estadounidenses. Trump acusa también a China de violar los derechos de propiedad intelectual para hacerse de tecnología estadounidense.

Analistas observaron que sobre esos tópicos, el entendimiento es muy vago y carece de detalles.

Kuijs advierte la falta de referencias a la política industrial de que es cuestionada tanto por s como por otros países por el exacerbado intervencionismo del Estado. Eso "pone en evidencia que las tensiones más grandes no han sido resueltas", añadió.

Alden considera que sería un "fracaso" para Washington contentarse con lo alcanzado porque es "casi nada".

" aceptó comprar cantidades masivas adicionales de productos agrícolas y de granja. Sería una de las mejores cosas que le pueda pasar a nuestros agricultores después de muchos años", tuiteó Trump.

"Los problemas están en la tecnología y la industria del futuro. Cantar victoria por el aumento de las exportaciones agrícolas es absurdo, ridículo", dijo Alden.

A su juicio, el anuncio de ese consenso logrado el sábado debe enmarcarse en la perspectiva de la cumbre que celebrarán Trump y el líder norcoreano el 12 de junio. China es el mayor aliado de

"La cooperación china es muy importante para que la cumbre sea un éxito", dijo Alden. Y el compromiso del sábado reflejaría "un deseo de no atizar el conflicto comercial con China antes de la cumbre", afirmó.