La Administración General de Aduanas de China anunció hoy jueves en un comunicado que ya no se requerirá a los viajeros transfronterizos que reporten cierta información relacionada con el COVID-19, como resultados de pruebas o infecciones previas, al pasar por la aduana a su llegada al país.
Los viajeros internacionales que planeen entrar en China aún deberán entregar los test y demás datos relacionados con la enfermedad a las embajadas del país asiático en el exterior antes de subirse a los vuelos.
China mantiene una estricta política de tolerancia cero contra el COVID-19, pero ha tomado recientemente medidas para facilitar los viajes internacionales y que estos sean menos pesados, como acortar los periodos de cuarentena para los viajeros que ingresen al país.
La noticia llega el día después que las embajadas chinas en varios países del mundo anunciaran que volverán a conceder visados de estudiante a aquellas personas admitidas por universidades del país asiático tras más de dos años.
Como todas las personas que entran en China en la actualidad, los estudiantes que regresen al gigante asiático habrán de permanecer en una cuarentena de al menos siete días en un hotel sufragado por ellos mismos y designado por las autoridades.
De momento, el país permanece cerrado al turismo internacional.