Chilena Isla de Pascua limita ingreso de turistas a 30 días

que deseen viajar a solo podrán permanecer, a partir de este miércoles, un máximo de 30 días en un intento de las autoridades locales de regular el crecimiento demográfico que está amenazando la sustentabilidad ambiental de este remoto territorio .

Con 116,000 al año y una población de 7,750 personas de acuerdo al último censo –sólo un 40% de ellas nativas-, la I trató por años que el gobierno regulara la llegada de visitantes. Este miércoles, su anhelo se hizo realidad al entrar en vigencia la ley aprobada por el Congreso el pasado marzo.

"Esta es una isla mágica, todos queremos visitarla, pero también es una isla sensible y por lo tanto tenemos que cuidarla. La nueva ley lo que busca es regular el turismo en la isla", dijo al canal de noticias 24 horas el presidente Sebastián Piñera desde Rapa nui nombre de la isla en lengua vernácula.

A partir de ahora, además de limitar la permanencia tanto para extranjeros como para no nativos, quienes quieran viajar a deberán llenar un formulario especial, tener una reserva en algún hotel o presentar una carta de invitación de algún isleño, junto con exhibir pasajes de ida y vuelta.

Quienes pretendan vivir en la isla deberán ser padre, madre, cónyuge o hijo de una persona perteneciente a la etnia rapa nui, el pueblo originario de la isla de origen polinesio.

Fuera de esta ascendencia, podrán vivir en la isla funcionarios públicos, trabajadores de organizaciones que presten servicios al Estado y quienes desarrollen alguna actividad económica independiente en dicho territorio junto a sus familias.

Evitar la saturación

La regulación se presenta en medio de un creciente auge del turismo y el desarrollo inmobiliario –principalmente hoteles- en esta isla, uno de los destinos turísticos más apreciados de , cuya extensión alcanza a los 168 km2 y se ubica en la Polinesia a unos 3.500 km del continente americano.

Los isleños se quejan de que la masiva presencia de "los del conti" -como llaman a quienes vienen desde el resto de - está agotando los recursos naturales, como el agua y la energía eléctrica, provocando, además, la pérdida de la idiosincrasia local.

La sobrepoblación también ha generado un problema con la basura, poniendo en riesgo la sustentabilidad ambiental de la isla.

Hace una década, en la isla se generaban 1,4 toneladas de basura al año por habitante; hoy la cifra alcanza 2,5 toneladas, con un bajo porcentaje de reciclaje.

Cambio de nombre

fue el nombre que le puso a este territorio insular una expedición holandesa en 1722 tras arribar a ella en Pascua de Resurrección. Recién en 1888, anexó la isla a su territorio.

Sin embargo, los isleños siempre la llamaron Rapa Nui, que en el idioma significa 'el ombligo del mundo', en referencia a su ubicación en medio del océano Pacífico.

Como una forma de rescatar su cultura, el gobierno anunció que impondrá 'suma urgencia' a una ley que se encuentra desde 2016 en el Congreso, para cambiar su nombre oficial a 'Rapa Nui- '. Con esta indicación, se debería analizar la iniciativa en el transcurso de 15 días.

"Queremos hacer un acto de reconocimiento histórico, de reivindicación: reconocer el origen y la historia milenaria de la isla", afirmó Piñera, en un acto en la isla.

Administrativamente, la isla forma -junto a la deshabitada isla Salas y Gómez- la comuna de , perteneciente a la región de Valparaíso, en el centro de Chile, aunque una reforma constitucional de 2007 estableció a la isla como un "territorio especial", de manera que su gobierno y administración están regidos por un estatuto distinto al resto del país.