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Canadá pretende aumentar significativamente sus umbrales de inmigración durante los próximos tres años para compensar la caída en el número de inmigrantes recibidos en el 2020 debido a la pandemia, anunció el ministro del área.
El país prevé acoger a más de 1.2 millones de inmigrantes entre el 2021 y 2023, casi 200,000 más que el techo establecido antes de la pandemia, dijo el titular de la cartera de Inmigración Marco Mendicino.
En el 2020, Canadá habrá acogido solo a una fracción de los 341,000 inmigrantes inicialmente previstos, debido a la pandemia de COVID-19, que ha provocado el cierre de fronteras y la suspensión de los vuelos internacionales, dijo en un el ministro.
La situación debería volver a la normalidad en el 2021, según este plan de inmigración centrado principalmente en el crecimiento económico, pero también en la reunificación familiar y la acogida de refugiados.
Para compensar la caída en el número de inmigrantes en el 2020, el gobierno planea, en particular, otorgar la residencia permanente a trabajadores temporales, solicitantes de asilo y estudiantes extranjeros que ya se encuentran en Canadá.
“Los recién llegados han desempeñado un papel desmesurado en nuestra respuesta al COVID-19”, dijo Mendicino, rindiendo homenaje a los solicitantes de asilo que trabajaron en primera línea en hogares de ancianos afectados por la pandemia en la primavera boreal.
“Los inmigrantes son vitales para nuestro sistema de salud y representan uno de cada cuatro trabajadores en nuestros hospitales y hogares de ancianos”, dijo.
Un tercio de los dueños de negocios en Canadá son inmigrantes, remarcó.
En el 2019, la inmigración representó el 80% del crecimiento de la población de Canadá, un país de 38 millones de personas.