Los costos asociados a tener que cambiar de proveedores, y la carga de las declaraciones de aduanas, las certificaciones y las auditorías todavía podrían terminar de convencer a las compañías automotrices de que es mejor invertir en otro lugar. (Bloomberg)
Los costos asociados a tener que cambiar de proveedores, y la carga de las declaraciones de aduanas, las certificaciones y las auditorías todavía podrían terminar de convencer a las compañías automotrices de que es mejor invertir en otro lugar. (Bloomberg)

La industria automotriz evitó un desastre cuando el Reino Unido y la Unión Europea sellaron un acuerdo comercial posterior al brexit, pero no lo suficientemente pronto para evitar que fabricantes de automóviles anunciaran el cierre de fábricas y cancelaran planes para fabricar varios vehículos nuevos en el país.