La minería ilegal del oro

Elmer CubaSOCIO DIRECTOR Macroconsult

Esta actividad amenaza al estado de derecho. Es practicada por "empresas" que operan lejos de la legalidad, tanto en términos de la reglamentación del sector minero, como de normas medioambientales, laborales y tributarias. En 2011, el valor de las exportaciones de procedencia ilegal habría llegado a casi US$ 2,900 millones. De ellos, cerca de US$ 1,100 millones proceden de la explotación aurífera de Madre de Dios, según cifras del MEM. Los otros US$ 1,800 millones, del resto del país.

En conjunto, esta actividad informal alberga a cerca de 100,000 trabajadores directos y otros 400,000 trabajadores indirectos. En un sentido analítico, la economía de la minería ilegal del oro es similar a la economía del narcotráfico. Es decir, se trata de decenas de miles de familias involucradas y dispersas en gran parte del territorio nacional.

Pero, a diferencia del narcotráfico, en este caso se conoce a los exportadores. Esta diferencia será clave en el proceso de formalización del sector "formalizable" y en la lucha contra los depredadores del medio ambiente.

La actividad de la minería ilegal está relacionada con multiplicidad de organismos: MEM, MEF, Minam, Minter, Mintra, Minsa, Produce, Ingemmet, Digesa, OEFA, Sernanp, Sunarp, Sunat, INC, ANA, GORE, Discamec. Por ello, enfrentar la minería ilegal va más allá de solamente el MEM. Tal vez es hora de evaluar la creación de un organismo especializado, similar a Devida en el caso del narcotráfico. Afortunadamente, se tiene ya un Plan de Formalización de la Minería Artesanal que data del 2011. El gobierno actual ha decidido enfrentar el problema y ha dado varias normas al respecto. Estas pueden ser perfectibles para su correcta aplicación y cumplimiento en el tiempo.

Alcanzamos algunas sugerencias: – Reforzar las capacidades de gestión empresarial (técnicas, legales, ambientales y organizativas) de los mineros ilegales para su formalización.

- Fortalecer la fiscalización en toda la cadena de valor: erradicación, interdicción y el lavado de activos. – Reforzar las direcciones regionales de minería (DREM), o ¿revertir la delegación de funciones? – Recoger experiencias exitosas de compañías formales y la pequeña minería en su área de concesión. – Adelantar usos del canon con asesoría del gobierno central y regional, para infraestructura básica de salud, educación, seguridad, servicios de agua y saneamiento, electricidad y caminos.