(Reuters) La canciller alemana, Angela Merkel, rechazó los llamados de sus opositores locales de centroizquierda y de otros líderes europeos para implementar planes de estímulo financiados con nueva deuda, diciendo que esa política simplemente sumiría al continente en una crisis más profunda.
Desde la victoria del socialista Francois Hollande en las elecciones presidenciales francesas, Merkel está bajo creciente presión para flexibilizar las medidas de austeridad que, como líder de la mayor economía europea, ha recetado como el remedio para la crisis de la zona euro.
Sin embargo, la canciller de centroderecha parece mantener su posición, diciendo a la cámara baja del parlamento alemán que la reducción de la deuda y el impulso al crecimiento eran "pilares gemelos" de la política europea, más que caminos alternativos.
"El crecimiento mediante reformas estructurales es sensato, importante y necesario.
El crecimiento basado en endeudamiento simplemente nos llevaría de vuelta al comienzo de la crisis, y es por eso que no deberíamos hacerlo y no lo haremos", dijo Merkel, quien recibirá a Hollande la próxima semana.
EN CORTO
La OCDE . constató que los signos de cambio positivo que se vienen percibiendo en la zona euro se limitan a algunos de sus países, mientras se confirman de nuevo signos todavía más fuertes de recuperación económica en Japón y EE.UU.