El pasado mes de marzo las exportaciones mexicanas a EE.UU. superaron a las chinas por primera vez en muchos años. Esto ha llevado a un debate sobre si la guerra comercial entre China y EE.UU. pudiera beneficiar indirectamente a las economía de América Latina, que sustituirían a algunas exportaciones chinas.
Gonzalo Garland, economista y profesor de IE BUSINESS SCHOOL, señala que, a pesar de que algunos países y algunos sectores concretos pudieran verse beneficiados de forma puntual, una guerra económica abierta entre las dos potencias terminaría afectado al resto de economía, también de América Latina, por la interdependencia global de los mercados y las cadenas de producción.
A pesar de ciertos beneficios puntuales que pueden haber en ciertos países, la mayor parte de especialistas o economistas señalan que el incremento de la guerra comercial es perjudicial a nivel global. Se está viendo un enfriamiento de la economía china y americana. Además, existen quejas por parte de los consumidores respecto a un aumento de precios. A esto, el Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial (BM) han denominado hace muchos años "heridas autoinflingidas".