MDN
Rusia 2018

| La invasión de seguidores peruanos a la ciudad de Saranks disfrazó las gradas del Mordavia Arena con los colores rojo y blanco, la indumentaria que distingue sobre el césped a los incas.

Desde hace dos días Saranks, una ciudad pequeña ubicada a 600 kilómetros de Moscú, recibe aficionados de Perú, que masivamente se han desplazado a Rusia para disfrutar del retorno a un Mundial, 36 años después, de su selección.

No ha reparado en gastos el hincha peruano. Perfectamente identificable, presumido por las calles con su camisa enfundada y la alegría al cuerpo, transita por las avenidas de una localidad que, por una vez, se amolda a los reclamos del fútbol de alto nivel.

Elegido por Panamá como su cuartel general durante el torneo, Perú arrebató el protagonismo al combinado canalero, que lleva en Saransk más de una semana.

Será Perú, junto a Dinamarca, el primero que salte al césped del Mordovia Arena para oficializar la elegancia de un estadio remozado para la ocasión y que espera a más de 40.000 seguidores en cada uno de los cuatro partidos que ha fijado la organización.