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restaurantes de lujo

| Las preferencias en habitaciones privadas están cambiando. Los asuntos corporativos de más de cuatro personas tendían a servir pollo, pescado o carne en salones sin gracia.

Ahora los paladares cultivados exigen más. También sucede que a veces es más fácil conseguir la mesa privada en un restaurante que obtener una mesa más pequeña durante el horario de más demanda.

La clave está en las opciones. Los comensales corporativos desean poder hacer cambios, sentirse menos en una boda y tener más privacidad, de ahí el éxito de los nuevos Four Seasons en Nueva York y los Brigadiers en Londres.

La capital inglesa tiene un beneficio adicional en la profusión de clubes privados como el Devonshire Club y The Ned, que tienen habitaciones excelentes, pero usted tiene que ser miembro o conocer a alguien que lo sea.