El Niño Costero destruyó los hogares de muchas personas en el Perú. (Foto: Reuters)
El Niño Costero destruyó los hogares de muchas personas en el Perú. (Foto: Reuters)

Ante el aumento del caudal del río Rímac y su reciente desborde en Chosica, Jorge Ochoa, presidente de la Comisión de Trabas Burocráticas de la , aseveró que este tipo de sucesos se vuelven a presentar debido a la falta de coordinación y planificación en la de las zonas que ya habían sido afectadas por .

Reveló que la paralización de las obras, se debe, en parte, a las limitaciones que hay que afrontar para tramitar o aprobar los expedientes técnicos de estos proyectos de infraestructura.

"Las cosas no se hicieron en su debido momento porque hay una serie de trámites, exigencias y requisitos que debieron hacerse hace 6 u 8 meses. Se ha perdido el tiempo, cuando se demandaba hacer un trabajo en conjunto. Lo que ocurre ahora en Chosica es resultado nuevamente de la improvisación", expresó Jorge Ochoa, presidente de la Comisión de Trabas Burocráticas de la CCL.

Ochoa consideró que es necesario reubicar a los pobladores de las quebradas. "Reubicarlos es una necesidad natural, nadie debe vivir en quebradas. Ya no es momento de pensar en reconstrucción, estamos tarde para eso. Sin embargo, hay que pensar en el bienestar de los pobladores", comentó.

Cabe precisar que muchos vecinos de las zonas afectadas aún permanecen viviendo en las carpas provisionales que se establecieron el año pasado.

Por su parte, Alberto Ego-Aguirre, presidente de la Comisión de Asuntos Marítimos y Portuarios de la CCL, coincidió en que el sistema de contrataciones en el país es muy burocrático, y que está diseñado de tal forma que impide que el Gobierno en 24 horas tome medidas de emergencia como, por ejemplo, comprar maquinarias en casos de desborde.

"Un muro de contención y canalización de ríos, son una alternativa, pero eso no funcionará si el poblador sigue construyendo en el mismo lugar. ¿Y por qué construyen en estas zonas? Porque saben que finalmente les instalarán los servicios públicos de agua y luz", comentó Ego-Aguirre.

Cabe indicar que las pérdidas millonarias que provocó el fenómeno del Niño Costero en 2017 se debieron a la falta de prevención tanto en previsión como infraestructura para contener al fenómeno.