Los gobiernos deben reestructurar el bienestar y la educación, y luchar contra las concentraciones de poder enquistado. / AFP / Yann Schreiber
Los gobiernos deben reestructurar el bienestar y la educación, y luchar contra las concentraciones de poder enquistado. / AFP / Yann Schreiber

En 1920, Warren Harding armó su campaña para las elecciones presidenciales en Estados Unidos en torno a su nueva palabra “normalcy” (“normalidad”). Fue una apelación a la supuesta ansia de sus compatriotas por olvidar los horrores de la Primera Guerra Mundial y de la pandemia de gripe de 1918, y retornar a las certezas de la Era Dorada de fines del siglo XIX.