Redacción Gestión

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El mundo de las comunicaciones ha cambiado radicalmente en el Perú en los últimos 25 años. Hasta inicios de la década de los noventas se debía esperar meses para acceder a una línea de telefonía fija.

"Cuando por fin llegaba el teléfono (línea fija) a tu casa, era como cuando se prende la luz por primera vez en tu pueblo. Costaba mucho, unos US$ 2,000 dólares para poder tener línea. Pero aun cuando tenías el dinero, no necesariamente podías tener el servicio, pues habían listas de espera y podía tomar hasta cinco años", recuerda Liliana Ruiz, presidenta de la consultora Alterna Perú.

Por ello, en aquella época la penetración de la telefonía fija era de apenas un 3% de los hogares, sobre todo rurales. Mientras que el uso de la telefonía celular aún era insignificante.

Un punto de quiebre para esta situación fue de la Compañía Peruana de Teléfonos, la cual fue adquirida por la española Telefónica.

"En esa época Telefónica no era todavía de talla mundial, pero conducida con criterios de eficiencia empresarial. Eso ya marcaba una diferencia radical respecto a lo que teníamos antes. Además se asumieron compromisos de inversión. Entonces ese fue un hito disruptivo, que muchos recordamos de aquella época", sostiene Carlos Huamán, CEO de DN Consultores.

El segundo punto de quiebre se dio en 1998 con el cambio de regulación bajo el famoso lema "el que llama paga". "Antes de 1998 el que pagaba era el que recibía la llamada. Entonces cualquier persona que tuviera un teléfono móvil tenía el temor de que lo llamaran", anota Huamán.

Tras ello comenzó la masificación de la telefonía móvil, cambiando la vida de las personas, tanto en zonas urbanas y sobre todo rurales.

A la fecha ya existen más de 30 millones de celulares a nivel nacional, con una penetración en el 80% de los hogares. Mientras los teléfonos fijos bordean los 4 millones, con una penetración de 10%. ¿Por qué esta diferencia? "Muchos hogares ya no solicitan el teléfono fijo pues no lo van a usar, ni en zonas rurales, no lo necesitan. En cambio sí es muy importante el tener un celular", anota Liliana Ruiz.

A través de los smartphones y el acceso al internet, ya se pueden realizar transacciones bancarias. Pero este año empezará a operar el sistema de "dinero electrónico", mediante el cual se podrán realizar transferencias de dinero a través de un celular sencillo y sin necesidad de tener acceso a internet.

En los últimos años han llegado dos nuevos operadores, Bitel y Entel, que han impulsado una fuerte competencia a Telefónica y Claro. Con ello los analistas esperan que las tarifas sigan bajando y mejore la calidad del servicio ¿qué podemos esperar de la telefonía celular en los próximos años?

Carlos Huamán subraya que el desafío para los próximos cinco años es buscar que las tecnologías ayuden a los ciudadanos a acceder a más servicios. "Por ejemplo, el gobierno electrónico, ya quisiera pagar mis impuestos y trámites municipales aquí (por el celular). Acceder a clases de universidades de otro país, etc.", apuntó el analista.