Sernanp: Las áreas naturales protegidas pueden aumentar en 50% la producción agrícola cercana

El problema de la contaminación y el es bastante familiar. Todos experimentamos el incesante (y extraño) calor en la ciudad, en medio del otoño, y nuestras reservas tampoco la pasan muy bien.

"Si no implementamos acciones que nos lleve a prevenir conservando o adaptarnos al cambio climático, vamos a sufrir un gran impacto", advirtió a Gestión.pe el especialista del (Sernanp), Deyvis Huamán.

El impacto más obvio lo observamos durante el último desastre que generó el Fenómeno El Niño Costero hace un año. No obstante, el daño colateral también encuentra un norte económico.

Según el experto, la protección de las (ANP) beneficia directamente al agro, porque ofrece una mejor calidad de suelos, agua y recursos, en general.

"Contar con un ANP cercana a campos agrícolas, ha hecho que la producción se incremente en un 50% por el clima y la calidad de agua", acotó.

Huamán asegura que cuidar el ambiente es una inversión, y bastante real. "Por cada sol que inviertas en prevenir el cambio climático recibes diez soles, pero por cada sol que no inviertas puedes perder hasta cien".

Y es que incluso las pequeñas "ventajas" que pueden desprenderse del exceso de lluvias, pueden terminar en una catástrofe.

A mayor precipitación, mayor vegetación. Las lluvias en el norte generaron una oportunidad, pero con ella también un riesgo. "Crece un bosque estacionalmente seco, pero luego nos deja un pasivo porque esta vegetación muere y deja mucha materia vegetal seca, que puede convertirse en un incendio", explicó.

La clave, como siempre, está en la educación. "Se debe prevenir que la gente queme lo queda de su chacra. Que sepan manejarlo antes de que llegue al bosque seco".

La labor educativa también rinde sus frutos. La recuperación de la tortuga taricaya en la Reserva Nacional Pacaya Samiria ha permitido la generación de S/ 3.7 millones anuales por el aprovechamiento de productos derivados.

Por otro lado, la protección de los bofedales fue clave para la repoblación de vicuñas, que pasaron de 1,000 a casi 15,000.

"Ese trabajo nos ha llevado a hacer un manejo adecuado del recurso e incrementar la esquila de la fibra de vicuña", añadió.